Diversos cubanos se manifestaron a favor de Venezuela en La Habana.
EFELA HABANA.- Estados Unidos y Cuba reanudan este lunes su histórica negociación para retomar sus vínculos diplomáticos, en medio de las tensiones que han causado en la región las nuevas sanciones de Washington a Venezuela.
La máxima representante del gobierno de Barack Obama para América Latina, la secretaria adjunta del Departamento de Estado Roberta Jacobson, tenía previsto llegar a La Habana en la noche del domingo.
Las reuniones con la alta delegación cubana presidida por la diplomática Josefina Vidal deben extenderse uno o dos días más, según previsiones del Departamento de Estado. Washington informó el viernes a corto plazo de los encuentros, los terceros que celebran ambas partes después de dos rondas en enero en La Habana y en febrero en la capital estadounidense.
Según fuentes diplomáticas norteamericanas, Jacobson viajó a la isla con una delegación más pequeña de lo habitual.
"Las delegaciones intercambiarán sobre temas relacionados con el proceso de restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos", confirmó la parte cubana sobre la cita. La última ronda de conversaciones tuvo lugar dos semanas atrás.
El gobierno de Obama espera poder reabrir su embajada en La Habana antes de la Cumbre de las Américas de abril en Panamá, una cita inédita a la que deben asistir por primera vez todos los países del continente.
Cuba, por su parte, ha subrayado que espera entre otros pasos que Estados Unidos retire a la isla de su lista de Estados patrocinadores del terrorismo, en la que el país antillano está desde 1982.
El gobierno de Raúl Castro endureció en los últimos días sin embargo ligeramente el tono contra Estados Unidos debido a las nuevas sanciones que Washington impuso a Venezuela, un estrecho aliado de Cuba.
Obama calificó hace unos días la situación en Venezuela, donde varios dirigentes opositores han sido encarcelados en el último año, como una "amenaza para la seguridad nacional" de Estados Unidos.
La isla, que depende en gran medida del suministro de petróleo barato por parte del gobierno de Nicolás Maduro, rechazó lo que calificó como una política de "zanahoria para Cuba y garrote para Venezuela".
Simpatizantes del castrismo organizaron en la noche del domingo un concierto de apoyo al país sudamericano en la Escalinata de la Universidad de La Habana, poco después de la llegada prevista de Jacobson a la isla.
Otros países del bloque latinoamericano cercano al chavismo, como Bolivia, también criticaron con dureza a Estados Unidos.
El 10 y el 11 de abril está previsto que se reúnan en Panamá todos los mandatarios de la región para la Cumbre de las Américas, la primera a la que asistirá Cuba. Obama y Raúl Castro se verán ahí previsiblemente las caras también por primera vez en un foro oficial, después del fugaz encuentro que tuvieron a finales de 2013 durante el funeral de Nelson Mandela en Sudáfrica.
Obama y Castro anunciaron el pasado 17 de diciembre un histórico acercamiento entre ambos países tras décadas de hostilidades. Washington y La Habana acordaron retomar las relaciones diplomáticas rotas en 1961 tras meses de negociaciones secretas, saldadas con un intercambio de prisioneros.
Pese al deshielo diplomático, ambos países han subrayado que mantienen "profundas diferencias". Sobre todo el gobierno de Obama ha señalado en varias ocasiones que sigue preocupado por la situación de las libertades civiles en la isla socialista.