JERUSALÉN.- El líder centrista que quedó segundo en las elecciones parlamentarias israelíes de esta semana no se unirá al próximo gobierno, según afirmó el jueves, acusando de racismo al primer ministro, Benjamin Netanyahu.
Isaac Herzog dijo que su partido Unión Sionista, que fue el segundo más votado, se sentará en la oposición y "desafiará a un estrecho gobierno de derechas".
Herzog hizo esas declaraciones el jueves en Army Radio. El último recuento de los comicios del martes muestra que la Unión Sionista consiguió 24 escaños, frente a los 30 de Likud.
El líder centrista criticó la campaña de Netanyahu, señalando que "rozaba el racismo" y se basaba en "mentiras, hostilidad y provocar miedo".
En un último intento por atraer a sus partidarios a las urnas, Netanyahu dijo que los ciudadanos árabes del país estaban votando "en manada" y ponían en peligro la posición de gobierno de la que ha disfrutado durante varios años su Partido Likud.
Esos comentarios provocaron acusaciones de racismo de los árabes israelíes y un reproche de la Casa Blanca.