BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) instó este sábado a la comunidad internacional a tomar medidas "firmes y eficaces" a nivel regional, nacional y mundial para eliminar toda forma de discriminación racial.
Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, recordó que hace 50 años se adoptó una convención para luchar contra este fenómeno a nivel global.
"Ahora más que nunca es imprescindible que la comunidad internacional tome medidas firmes y eficaces a nivel regional, nacional e internacional para eliminar toda forma de discriminación racial", señaló la alta representante en un comunicado.
Recordó que la convención constituye la piedra angular de la lucha mundial contra la discriminación racial y como tal, "nos sigue recordando que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y que cualquier suposición o creencia de lo contrario es errónea y moralmente falsa".
"Este es el motivo por el que la convención debe ser ratificada y aplicada universalmente", insistió Mogherini.
La discriminación racial, la incitación a la discriminación, al odio o la violencia contra personas que pertenecen a un determinado grupo étnico o religioso, y los actos de violencia motivados por el racismo o la xenofobia "lesionan la propia esencia de las libertades fundamentales y los derechos humanos universales, y no deben tolerarse jamás", subrayó la política italiana.
En su opinión, "se hace indispensable" adoptar medidas enérgicas para prevenir y luchar contra toda forma y manifestación de racismo y xenofobia a fin de crear sociedades seguras, integradoras y plurales, basadas en los valores de la diversidad, la tolerancia y el respeto mutuo.
Dichas medidas deberán incluir no solo respuestas jurídicas eficaces, sino también medidas preventivas que fomenten la inclusión social y la igualdad de todos los miembros de la sociedad, indicó.
En este sentido, la UE proseguirá su cooperación con los países socios y con organizaciones internacionales como la ONU, el Consejo de Europa y la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), así como con las organizaciones pertinentes de la sociedad civil, explicó Mogherini.
La actuación de la UE centrará su atención particularmente en todas aquellas personas a las que la acumulación de múltiples formas de discriminación haya convertido en las más vulnerables.