Xi Jinping, Presidente de China.
AFP (archivo)BEIJING.- "Hay que mostrar coraje y agallas" al impulsar las reformas. Tal fue el mensaje lanzado por el Presidente chino, Xi Jinping, al tiempo que el todopoderoso Partido Comunista (PCCh) prepara una nueva batería de cambios que buscan perfeccionar la educación, la salud y la administración de justicia en la potencia asiática.
Entre las modificaciones previstas se cuenta el mejoramiento de las condiciones de los profesores que laboran en áreas rurales, de hospitales públicos y de la supervisión de los procesos judiciales.
Según la agencia oficial Xinhua, las medidas fueron discutidas el miércoles por el comité de reforma del PCCh con la presencia del jefe de Estado.
El Primer Ministro, Li Keqiang, el vicepresidente, Liu Yunshan, y otro miembro del Comité Permanente (órgano de máximo poder del gobierno), Zhang Gaoli, también acudieron a la cita.
El impulso a las reformas del régimen estimulado por Xi ocurre al tiempo que el gobierno endurece la lucha contra la corrupción y, al mismo tiempo, refuerza la censura en campos como internet y las redes sociales.
Necesidad de "educación igualitaria"
En cuanto a educación, los líderes acordaron un plan de reforma del sistema de enseñanza en las zonas rurales para los próximos cinco años y admitieron que las condiciones en los establecimientos del centro y el oeste de China (más depauperados) son "un punto débil".
"Es crucial que todos los niños reciban una educación igualitaria para evitar que la pobreza se extienda a la siguiente generación", subraya un comunicado divulgado tras el encuentro y citado por Xinhua.
En este plano, las autoridades abogaron por incrementar el número de "buenos profesores en las áreas pobres, mejorar la moral política de los docentes, aumentar su salario y persuadir a los profesores de las ciudades a que trabajen en las escuelas rurales".
En sanidad, los líderes chinos plantean la reforma de los hospitales públicos de las ciudades, de manera que "se gestionen para el bien público, no para buscar beneficios".
La iniciativa fue mencionada mientras crecen las denuncias sobre corrupción en los centros asistenciales relacionadas, entre otras causas, a los bajos sueldos de los médicos.
"El servicio debería ser accesible, igualitario y beneficioso para la gente", enfatiza el Gobierno, que busca imponer cambios en las áreas de los seguros médicos y los salarios de los trabajadores sanitarios.
En cuanto a la administración de justicia -rígidamente sometida al control comunista-, la cúpula del PCCh adoptó un plan piloto para revisar y aumentar el sistema de jurados públicos, bajo el cual se contratará a supervisores para garantizar la "neutralidad" de los mismos y escudriñar las decisiones de los magistrados.
"Cualquier interferencia en los juzgados será castigada severamente", asegura el comunicado.