Jefa de diplomacia de la UE, Federica Mogherini, el ministro Mohamad Yavad Zarif, canciller británico, Philip Hammond y el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry a su llegada a la sala de prensa en la que se informará de los avances de las negoc
EFELAUSANA.- Las grandes potencias e Irán alcanzaron este jueves en Lausana un compromiso que esboza las grandes líneas del histórico acuerdo destinado a impedir a Teherán dotarse de la bomba atómica.
En una declaración conjunta con su homólogo iraní, Mohamad Javad Zarif, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, anunció que se habían acordado "los parámetros clave" para un acuerdo final sobre el programa nuclear de Teherán.
Mogherini también indicó que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas respaldará un acuerdo final sobre el programa nuclear iraní, que deberá ser supervisado por la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
En Twitter, los dirigentes, entre ellos el presidente iraní Hassan Rohani, habían anticipado el cierre de un acuerdo marco tras varios días de negociaciones maratónicas.
"Se hallaron soluciones respecto a los parámetros clave del programa nuclear de Irán. La escritura [de un acuerdo final] debe comenzar inmediatamente para terminarla de aquí al 30 de junio", escribió Rohani.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, declaró por su parte que las potencias del 5+1 (Estados Unidos, China, Rusia, Reino Unido, Francia y Alemania) e Irán tenían "ahora los parámetros para resolver los principales asuntos" del programa nuclear iraní.
En una comparecencia en la Casa Blanca, el Presidente estadounidense, Barack Obama, saludó poco después un acuerdo "histórico" con Irán sobre programa nuclear, pero advirtió que si Teherán hace trampa "el mundo lo sabrá".
Según los primeros elementos divulgados de este preacuerdo, la capacidad de enriquecimiento de uranio de Irán deberá reducirse y Teherán mantendrá 6.000 centrifugadores activas de las 19.000 actuales.
Las sanciones estadounidenses y europeas se levantarán en función del respeto de los compromisos por parte de Irán, advirtió inmediatamente la Unión Europea.
"Buenas noticias", tuiteó la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, poco antes de las 14:00 horas, mientras que su homólogo iraní habló de soluciones encontradas en la negociación nuclear en la misma red social.
Este anuncio pone fin a ocho días de maratón diplomático, en el que los negociadores discutieron día y noche para lograr un compromiso histórico antes de un acuerdo final.
Desde el miércoles por la noche, los representantes del 5+1 y de Irán negociaron "línea por línea" los principios de un primer acuerdo, según fuentes próximas a las negociaciones.
Como ha realizado diariamente desde el domingo, Israel, uno de los principales opositores al acuerdo con Irán, exigió este jueves que cualquier acuerdo sobre el programa nuclear iraní implique una "reducción considerable" de la capacidad atómica de Teherán, apuntó el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
En tanto, el ministro israelí de Inteligencia, Yuval Steintz, dijo que si Israel se queda sin una vía política, su gobierno seguiría contemplando una opción militar.
La comunidad internacional quiere examinar el programa nuclear iraní y controlarlo estrechamente para asegurarse de que Irán nunca se dotará de la bomba atómica, a cambio de un levantamiento de las sanciones que asfixian la economía de ese país.
Pero la negociación, relanzada en 2013 tras años de crisis, se estancaba en puntos clave: duración del acuerdo, el número de centrifugadoras y la modalidad de levantamiento de sanciones.
La historia continúa
"Este es un acuerdo marco. No se trata de regular la cuestión de forma definitiva, se trata de fijar los parámetros del acuerdo final y de clarificarlos de forma suficientemente precisa para evitar todas las ambigüedades posibles y que las disonancias queden mínimamente bajo control", explicó un diplomático occidental antes de las declaraciones.
El compromiso del jueves no pone punto final a la historia. De hecho, aunque los negociadores consiguen entenderse en los grandes "parámetros" y fijar las orientaciones bastante precisas, los detalles técnicos de este complejo dossier deberán aclararse antes del acuerdo final el 30 de junio.
"Llegar a un acuerdo de aquí al final de junio será una tarea inmensa y difícil", avisó Zarif el jueves por la mañana.
Kerry y Zarif necesitan un acuerdo de principio sustancial que les permita ganar tiempo ante sus bandos respectivos y poder enfrentar las hostilidades regionales contra cualquier tipo de compromiso.