RABAT.- Al menos 33 muertos, en su mayoría niños, dejó una colisión frontal entre un autobús de pasajeros y un camión en una carretera cerca de Tantán, en el sur de Marruecos.
Según fuentes relacionadas con la emergencia, los cadáveres han sido trasladados a la morgue de la ciudad de Tantán, mientras que otros diez heridos han sido ingresados en el Hospital Hasán II de dicha ciudad.
Entre los heridos está el segundo conductor del autobús, que resultó herido leve, pero al que no se ha podido tomar declaración de momento porque presentaba un severo cuadro de ansiedad tras el accidente.
En estos momentos, las investigaciones siguen su curso para esclarecer las circunstancias del accidente y determinar cuál es el vehículo responsable de invadir la calzada.
La mayoría de los fallecidos son niños de entre 12 y 14 años de edad, según informaron a Efe fuentes de la gobernación local de Tantán.
El director del hospital Hasán II de Tantán, Abdallah Daqaqi, explicó que la mayoría de los heridos salieron del hospital salvo algunos casos, entre ellos uno grave que fue trasladado al hospital de Marrakech por helicóptero, por lo que el número de fallecidos podría incrementarse.
El bus transportaba a un grupo de niños deportistas que viajaban a El Aaiún (capital del Sahara Occidental) tras haber participado los pasados días en los Juegos Nacionales de Escuelas de Deporte, en las cercanías de Rabat.
Por razones desconocidas, el vehículo chocó frontalmente con un camión con remolque, que al parecer transportaba productos inflamables.
A raíz del impacto, el bus quedó completamente calcinado, como pudo verse en las imágenes del accidente que circulan en la red.
Poco después de conocerse el accidente, el rey Mohamed VI de Marruecos anunció que va a asumir personalmente los gastos de traslado y entierro de los fallecidos.
Los accidentes de tránsito en Marruecos dejaron en 2013 más de 3.700 fallecidos, un 8,63 % menos que el año anterior, pero la siniestralidad aumentó en un 1,4 % hasta llegar a los 68.458.