La destrucción del fenómeno.
AFP
FAIRDALE.- Los vecinos de un pequeño pueblo del norte de Illinois en Estados Unidos, casi arrasado por un mortal tornado, podrían recibir acceso a sus viviendas el sábado para evaluar los daños de la tormenta que mató a dos mujeres que compartían amistad, favores y el mismo vecindario.
Jacklyn Klosa, de 69 años, fue hallada el viernes por la mañana entre los escombros de su casa de Fairdale, no lejos de donde murió el jueves por la noche Gerladine Schultz, de 67 años, cuando el tornado se abatió sobre su barrio en Fairdale, una comunidad de unas 150 personas.
La tormenta atravesó la zona, unas 80 millas (unos 129 kilómetros) al oeste de Chicago, y arrancó los edificios de sus cimientos.
Fairdale no tiene gobierno municipal, escuela ni televisión por cable, ni tampoco negocios grandes.
Algunos vecinos tenían caballos en el lugar, y una familia encontró a sus animales muertos entre los escombros el viernes por la noche.
Todas las viviendas de la comunidad fueron evacuadas, debido en parte a la falta de electricidad. Pero los árboles, cables eléctricos y restos salpicaban el suelo, planteando un riesgo de seguridad.
Los tejados de los edificios habían desaparecido. El metal de la estructura de los graneros apareció enredado entre los árboles.
Los vecinos se reunieron el viernes en un punto donde se había cortado la carretera a kilómetro y medio (una milla) del pueblo, ansiosos por revisar el estado de sus hogares.
Sin embargo, la policía les negó el acceso por considerar que era muy peligroso, y las autoridades indicaron que probablemente podrían acceder el sábado.
Al Zammuto, maquinista de 60 años de edad, dijo que él y otros habitantes recibieron alertas en su teléfono celular alrededor de las 6:45 p.m., pero no hicieron caso pues advertencias similares no habían generado ningún tipo de problemas.
Fue entonces que sus ventanas estallaron. Buscó refugio en momentos en que la tormenta llegaba, al tiempo que se desprendían los ladrillos del costado de su casa. Minutos después salió de su hogar y no pudo creer lo que veía.
Dijo que el pueblo se veía devastado, "parecía un basurero", y los sonidos eran perturbadores.
Al menos un tornado tocó tierra cerca de Fairdale, señaló la meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional Jamie Enderlen.
En principio se atribuyó al tornado una fuerza de EF4, lo que implica que podía provocar vientos de hasta 200 millas por hora.
Los equipos de evaluación de daños trabajaban el viernes para determinar cuánto tiempo estuvieron en tierra los tornados, su fuerza y la extensión de los daños.