JERUSALÉN.- El ministro israelí de Inteligencia, Yuval Steinitz, consideró este miércoles "un logro" para su país el compromiso alcanzado el martes en el Congreso estadounidense para que el acuerdo nuclear con Irán sea revisado en su fase final por los legisladores.
"Estamos ciertamente satisfechos esta mañana, se trata de un logro para la política israelí y el discurso ante el Congreso (del primer ministro, Benjamín Netanyahu en marzo pasado) ha sido decisivo para alcanzar esa legislación", manifestó Steinitz a la emisora pública "Voz de Israel".
El ministro añadió que el pacto logrado ayer a instancias de la mayoría republicana en el Congreso de EE.UU., era un paso significativo para obstaculizar un mal acuerdo con Irán, o al menos, lograr que el acuerdo sea lo más razonable posible.
Miembros del Partido Laborista, principal de la oposición en Israel, censuraron el tono autocomplaciente del titular de Inteligencia y aseguraron que el discurso pronunciado por Netanyahu no tuvo impacto alguno, y que en todo caso, el compromiso logrado ayer responde a la política interna norteamericana.
El Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense aprobó por unanimidad el texto que obligaría al Gobierno del presidente Barack Obama a que el acuerdo internacional alcanzado recientemente entre las potencias del G5+1 e Irán sobre su programa nuclear fuera revisado por los legisladores en su fase final.
Obama levantó ayer su oposición al proyecto lo que otorga al Congreso voz en el acuerdo nuclear con Teherán, después de que legisladores demócratas negociaran cambios en la norma y finalmente se ganara el respaldo bipartidista.
Esos apoyos se produjeron después de que la Casa Blanca manifestara que Obama podría estar "dispuesto" a firmar el proyecto de ley, con tal de que este no entorpezca el proceso negociador.
El nuevo proyecto de ley acorta el plazo para que el Congreso revise un acuerdo nuclear con Irán de los 60 días inicialmente propuestos a 30, y permite al presidente presentar el acuerdo hasta el 9 de julio, fecha posterior al límite del 30 de junio marcada entre las partes para firmar su pacto.
Asimismo, retira uno de los condicionantes más complejos de aceptar para el Gobierno estadounidense, ya que el proyecto original contenía una disposición que obligaba al Ejecutivo de Obama a certificar como parte del acuerdo que Irán ya no apoya a ninguna organización terrorista.
Netanyahu criticó duramente el proceso de negociación con Irán, así como el reciente acuerdo marco alcanzado por las potencias internacionales que considera insuficiente para impedir que la República Islámica desarrolle armamento nuclear.
Irán sostiene que su programa atómico tiene exclusivamente fines pacíficos, si bien siempre se ha opuesto a inspecciones, un punto de la negociación que se torna crucial en un eventual acuerdo final.