Inmigrantes durante una movilización organizada para pedir ayuda a Europa.
EFE.BRUSELAS.- Los líderes de la Unión Europea (UE) se encuentran evaluando medidas que les permitan multiplicar los recursos financieros para evitar la trata de personas en el Mediterráneo, luego de que esta semana un barco naufragara con casi mil personas a bordo.
La UE dará a conocer sus medidas hoy, pero un borrador del comunicado que se entregará a la prensa asegura que el plan implicaría a los 28 estados miembros para "aumentar las posibilidades de búsqueda y rescate" y "emprender esfuerzos sistemáticos para identificar, capturar y destruir barcos antes de que puedan ser empleados por traficantes".
La jefa de política exterior de la UE, Federica Mogherini, comenzaría de inmediato a preparar una operación que probablemente tendría un componente militar, según el texto.
"Tomaremos medidas ahora. Europa le está declarando la guerra a los contrabandistas", dijo el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, que estaba en Malta para asistir al funeral de 24 migrantes que murieron en el mar.
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, se mostró de acuerdo. "Las operaciones navales europeas en el cuerno de África han combatido con éxito la piratería, y debe desarrollarse una iniciativa similar para combatir con éxito el tráfico de personas en el Mediterráneo", escribió Renzi en una columna de opinión en el New York Times. "Los barcos de contrabando deben quedar fuera de servicio".
Una misión civil y militar para encargarse de esa tarea afrontaría a muchos obstáculos legales, y despertó controversia incluso antes de la cumbre.
Proyecto de reubicación y asilo
Además, el borrador de la cumbre señalaba que los países quieren "establecer un primer proyecto piloto voluntario de reubicación, que ofrezca al menos 5.000 plazas para personas cualificadas para recibir protección".
Tan sólo esta semana llegaron a Europa el doble de personas de las que contempla ese plan. Las 5.000 plazas supondrían una diminuta fracción de los cientos de miles de personas que probablemente llegarán este año.
Otra cláusula del comunicado propone reducir el tiempo necesario para procesar a los que buscan asilo, que ahora puede llevar hasta un año antes de que una persona sea procesada y se reconozca su derecho a quedarse. Los nuevos planos reducirían ese plazo a un máximo de dos meses.
El presidente del Consejo Europeo, instó a los mandatarios de los 28 países a "acordar medidas muy prácticas", como "reforzar las posibilidades de búsqueda y rescate, combatiendo a los contrabandistas y disuadiendo a sus víctimas de que pongan su vida en peligro, al tiempo que se refuerza la solidaridad".
También está previsto que los gobernantes respondan a la preocupación expresada por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, que pidió un programa europeo más fuerte de búsqueda y rescate y más canales de inmigración legal. "Todos tenemos un imperativo moral de actuar deprisa", dijo Ban en una carta a Tusk.