BRASILIA.- Fiscales federales de Brasil abrieron una investigación preliminar para determinar si el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva usó de forma impropia sus conexiones para beneficiar a la constructora Odebrecht SA en el extranjero.
El semanario "Época" publicó que el ex mandatario viajó frecuentemente al exterior con los gastos pagados por Odebrecht desde que dejó su cargo en 2011.
La revista aseguró que obtuvo documentos que demuestran que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil (Bndes) financió proyectos de Odebrecht valorados en al menos 1.600 millones de dólares en la República Dominicana y Ghana después de que Lula se reunió con líderes de esos países.
Una portavoz de la oficina de los fiscales federales confirmó la apertura de una pesquisa preliminar y dijo que tienen 90 días para decidir si el ex presidente cometió un delito y debe realizarse una indagatoria formal.
Odebrecht negó cualquier ilegalidad, asegurando en un comunicado que su relación institucional con Lula es normal y que Bndes sólo cubre el 7 por ciento de su financiación.
El Instituto Lula afirmó en su sitio web que el reportaje de "Época" está equivocado, ya que con sus viajes el ex mandatario sólo buscó fortalecer dos de sus grandes pasiones: el desarrollo de África y la integración latinoamericana.
Las noticias llegaron en un momento de escasa tolerancia por la corrupción en la mayor economía de Latinoamérica.
Las revelaciones sobre un multimillonario escándalo de sobornos en la compañía estatal Petróleo Brasileiro SA, más conocida como Petrobras, dañaron la popularidad de la sucesora de Lula, la Presidenta Dilma Rousseff, con llamados incluso a que sea sometida a un juicio político.
Ni Rousseff ni Lula, su mentor político, han sido implicados en este escándalo, pero el tesorero de su Partido de los Trabajadores sí fue encarcelado acusado de corrupción.
Lula no ha descartado volver a presentarse a la Presidencia cuando Rousseff concluya su segundo mandato en 2018.