BEIJING.- El Gobierno de China dijo estar "muy preocupado" por las informaciones que confirman proyectos de construcción de Filipinas y Vietnam en las disputadas islas Paracel y Spratly, que Beijing reclama como suyas, y pidió a las naciones vecinas que detengan estas obras.
"Filipinas y Vietnam han llevado a cabo masivas construcciones, entre ellas pistas aéreas, en territorios marítimos chinos ilegalmente ocupados", señaló en rueda de prensa la portavoz de Asuntos Exteriores china Hua Chunyin.
"Estamos profundamente preocupados y opuestos a ello, y pedimos a estos países que detengan todo comportamiento que viola la soberanía territorial china, sus derechos e intereses", subrayó.
El estadounidense Centro Estratégico de Estudios Internacionales hizo hoy públicas imágenes vía satélite que muestran trabajos de construcción por parte de Vietnam en las islas Paracel, controladas de facto por China pero reclamadas por la nación del sureste asiático.
Al mismo tiempo, autoridades filipinas reconocieron "pequeñas obras de reparación y mantenimiento" en zonas de las islas Spratly, reclamadas por Manila, Pekín y otros gobiernos de la región.
La portavoz china aseguró hoy que las justificaciones de Filipinas "carecen de fundamento y son ilegales" y aseguró que "desde los años 70, sin tener en cuenta la Carta de las Naciones Unidas y las normas básicas de las relaciones internacionales, han ocupado islas por la fuerza".
"No hay una sola línea en el Código de Conducta firmado en 2002 que hable de reclamaciones o trabajos ilegales, por lo que no puede usarse como herramienta política para esconder los comportamientos de Filipinas", añadió la fuente oficial.
Pekín, que en los últimos años ha edificado hasta una ciudad de nueva planta en islas disputadas, nunca ha negado que también lleva a cabo obras en las Spratly y Paracel, aunque la reciente publicación en una revista militar británica de fotos de una pista de aterrizaje militar china en el arrecife de Fiery Cross, en el primero de estos archipiélagos, reavivó la polémica.
El consejero de seguridad nacional de Filipinas, César García, afirmó ayer, jueves, que las acciones de Pekín en el mar de China Meridional, donde se encuentran los dos archipiélagos en disputa, se han convertido en la mayor amenaza para el país.