LONDRES.- El ex primer ministro británico Tony Blair sostuvo hoy que el Partido Laborista necesita un giro al centro parara recuperar la confianza de los electores tras el fracaso que sufrió esta semana en las elecciones generales del Reino Unido.
"Debemos dirigirnos a aquellos que dirigen las empresas, no solamente a los que trabajan en ellas", afirma Blair en un artículo en el diario "The Observer" dos días después de que Ed Miliband dimitiera como líder del partido.
Tras una campaña electoral en la que Miliband centró su mensaje en mejorar en sistema público de salud y las prestaciones sociales, los laboristas pasaron de 258 a 232 escaños, mientras que los conservadores se han asegurado una mayoría absoluta para gobernar.
Para Blair, primer ministro del Reino Unido entre 1997 y 2007, Miliband "hizo una campaña brillante en algunos momentos" y "mostró coraje", a pesar de lo cual "la derrota fue severa".
"Tenemos que persuadir a la gente de que dirigiremos la marcha de la economía con eficiencia. Eso incluye hacer una defensa mesurada de nuestros logros económicos cuando hemos estado en el Gobierno", señala el antiguo líder laborista.
Blair dice en su nota que el "centro" es "un estado mental, tanto como un conjunto de políticas".
"Eso quiere decir que en el mundo actual muchas soluciones cruzan las fronteras de la izquierda y la derecha tradicionales", sostiene el laborista, para quien el partido volverá a ganar "cuando comprenda que el mundo está cambiando y que esos cambios pueden ser utilizados para mejorar la vida de la gente".
Blair señala además que rehacerse del fracaso electoral no requerirá solamente rehacer el ideario político del laborismo sino fortalecer la estructura del partido.
"Las buenas ideas fallan si hay una mala organización o una mala estrategia", afirma, para señalar que "este es el momento para una renovación desde los fundamentos".
"Si nos movemos hacia el centro de forma estratégica, hay que tener cuidado con acumular medidas que, aunque de forma individual puedan resultar populares, en su conjunto puedan contradecir esa táctica y nos envíen demasiado a la izquierda", advierte Blair.
El ex jefe del Gobierno británico reconoce además que la situación en Escocia, donde el Partido Laborista ha perdido 40 de los 41 escaños que mantenía la pasada legislatura, es un "vasto reto" para los suyos.
"Nunca recuperaremos ese terreno siendo más 'escoceses' y más 'de izquierdas'. Ganaremos cuando nos enfrentemos a la ideología nacionalista al completo, con su filosofía reaccionaria enmascarada como progresismo", indica.