BEIRUT.- Al menos 60 personas han muerto en las últimas horas en combates por el control de un hospital en Yisr al Shogur, en el norte de Siria, entre las fuerzas leales al régimen de Bachar al Asad y rebeldes de tendencia islámica, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
De las víctimas, 32 eran efectivos progubernamentales y 28, insurgentes, según la misma fuente.
Los combates continuaron la pasada madrugada en el Hospital Nacional de Yisr al Shogur, en la provincia de Idleb, donde los opositores irrumpieron ayer.
En el centro hospitalario se calcula que hay unas 250 personas, entre soldados, sus familiares y otros civiles, que habían quedado cercados tras la toma de la localidad por parte de los insurgentes, entre ellos el Frente al Nusra -filial siria de Al Qaeda-, el pasado 25 de abril.
En las últimas horas, los combatientes del Movimiento de los Libres de Sham y otras facciones han recuperado el dominio de tres puestos de control en los alrededores de la población y en la carretera que la une con la localidad de Ariha.
Entretanto, aviones gubernamentales han lanzado un total de 40 bombardeos en la zona. Dos ataques aéreos tuvieron como objetivo uno de los edificios del complejo hospitalario.
La agencia de noticias oficial siria, Sana, que citó una fuente castrense, señaló hoy que todos los flancos de Yisr al Shogur están ahora al alcance de la artillería militar tras una serie de operaciones contra las guaridas de los "terroristas".
Según esta fuente, decenas de terroristas fallecieron y fueron heridos durante esos ataques en el eje que conforman las ciudades de Yisr al Shogur y Al Yanudieh y en las proximidades del Hospital Nacional.
Helicópteros militares han arrojado miles de folletos en Yisr al Shogur pidiendo a los "terroristas" que entreguen sus armas e instando a los vecinos a que permanezcan alejados de los escondites y lugares donde los opositores están apostados.
La fuente aseguró que las operaciones militares han causado el caos en las filas de "las organizaciones terroristas" en la población por las bajas masivas.
La mayor parte de la provincia de Idleb está en manos de los rebeldes, incluida su capital homónima.
En un discurso el miércoles, el presidente sirio, Bachar al Asad, afirmó que la ayuda iba en camino para rescatar a los soldados asediados en Yisr al Shogur, y se mostró confiado en la victoria, pese a reveses "normales" en cualquier batalla.