CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco se mostró el domingo "muy preocupado" por la suerte de los migrantes que huyen de la miseria y la persecución en Asia del Sudeste y pidió a la comunidad internacional que suministre "la asistencia humanitaria necesaria".
"Sigo con mucha preocupación y dolor en el corazón el asunto de muchos refugiados en el golfo de Bengala y el mar de Andamán", declaró el papa tras la plegaria del domingo en la plaza San Pedro del Vaticano.
"Felicito a los países que se mostraron dispuestos a acoger a estas personas, que se enfrentan a graves peligros y sufrimientos. Aliento a la comunidad internacional a suministrarles la asistencia humanitaria necesaria", agregó.
Más de 3.500 migrantes llegaron estos últimos días a Malasia, Indonesia y Tailandia. Los migrantes bangladesíes huyen de la pobreza y los rohingyas musulmanes escapan de las persecuciones de las que son víctimas en Birmania, país de mayoría budista.
Este éxodo dura desde hace años pero se convirtió en una grave crisis a principios de mes cuando Tailandia adoptó una nueva política represiva contra los pasadores de inmigrantes ilegales.
Miles de personas fueron abandonadas en el mar por los traficantes y algunos de sus barcos fueron rechazados en un primer momento por los países de la región a los que se dirigieron. La presión internacional llevó a Malasia e Indonesia a aceptar su acogida temporal.