WASHINGTON.- Unas precipitaciones récord que inundaron los estados de Texas y Oklahoma el fin de semana causaron la muerte de tres personas.
"Tenemos calles enteras en las que sólo quedan una o dos casas enteras, el resto son sólo bloques amorfos", dijo a CNN Kharley Smith, miembro de los equipos de emergencia en Hays County, Texas. En total se han perdido unas 400 viviendas.
Para hoy se esperan más tormentas, y al estar el suelo ya saturado un mínimo de lluvia "podría causar más inundaciones inmediatas", señaló el Servicio Meteorológico Nacional.
Una persona murió en la localidad de San Marcos en Texas y al menos otras dos están desaparecidas. Hay además otros ocho desaparecidos en Wimberley, en el mismo estado, según la web "kxan.com".
"Tenemos daños en la infraestructura de todo el condado", indicó el jefe de bomberos Ken Bell. "Se han caído las líneas eléctricas, hay escombros en las carreteras y los pilares de los puentes están socavados. No es el momento de moverse de un sitio a otro", añadió.
En Tulsa, Oklahoma, murió una mujer de 33 años al perder el control de su automóvil, informó CNN. Y en la vecina Claremore falleció un bombero al ser arrastrado al interior de una alcantarilla.