UE insta a Colombia y a las FARC a seguir comprometidos con diálogo de paz

BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) pidió hoy a Colombia y a las FARC que tomen medidas para rebajar las tensiones y los recientes enfrentamientos violentos, e instó a las partes a permanecer comprometidas con las negociaciones de paz en Cuba.

"Las recientes confrontaciones violentas entre las Fuerzas Armadas de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pueden poner en riesgo las mejoras de las negociaciones de paz generadas ya para la población de las áreas afectadas por el conflicto" en Colombia, señalaron los portavoces de la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini.

Las negociaciones entre el Gobierno colombiano y las FARC, que comenzaron hace 30 meses, pasan momentos de tensión a raíz de los ataques de las FARC contra militares y de las operaciones de las Fuerzas Armadas contra esa guerrilla que han dejado cerca de 40 rebeldes muertos.

Por ello la UE considera "importante que ambas partes permanezcan comprometidas con proseguir las negociaciones en La Habana y con no perder el impulso para lograr más avances en las conversaciones de paz", recalcó el Servicio de Acción Exterior de la Unión.

"Igualmente deben tomarse pasos concretos hacia la desescalada de la situación en el terreno", sostuvieron los portavoces de la alta representante de la UE.

Asimismo, la Unión urge a la rápida implementación del acuerdo para el desminado anunciado en marzo, porque ofrece una "oportunidad crucial para demostrar un compromiso continuado y mostrar a la sociedad colombiana los beneficios de la paz".

"La UE está preparada para apoyar este esfuerzo y otras iniciativas a fin de acompañar el proceso hacia la aplicación de un acuerdo de paz completo en beneficio de todos los colombianos", señaló el Servicio de Acción Exterior.

El Gobierno de Colombia inició en noviembre de 2012 conversaciones de paz con las FARC en La Habana y desde entonces se han logrado acuerdos parciales sobre los puntos referidos a desarrollo rural y reparto de tierras, participación política de la guerrilla y el problema del narcotráfico y los cultivos ilícitos.

En estos momentos se negocia el punto referido a la reparación de las víctimas del conflicto, uno de los aspectos más polémicos del diálogo, y quedan pendientes el cese del fuego y el abandono de las armas de la guerrilla.