NUEVA DELHI.- Los hospitales registraban este jueves en India una afluencia récord de pacientes víctimas de una ola de calor abrasador que cobró cerca de 1.700 vidas en poco más de una semana, el mayor número registrado en las dos últimas décadas.
Centenares de personas, sobre todo entre los más pobres, mueren durante el verano en India, pero en 2015 ya se ha superado las cifras de 1995, cuando según datos oficiales 1.677 personas sucumbieron al fuerte calor.
En el estado de Andhra Pradesh —por lejos el más afectado— las temperaturas alcanzaron a los 47 grados centígrados y 1.334 personas han muerto desde el 18 de mayo pasado.
Los médicos de esta región dijeron que nunca habían visto tantos casos graves como este año.
"Nuestros servicios están completamente repletos", dijo JV Subbarao, funcionario en el Instituto Rajiv Gandhi para las Ciencias Médicas, en Andhra Pradesh. "Trabajo en este distrito desde hace 40 años y nunca había visto algo igual, con tantas personas que llegan ya fallecidas", aseguró.
Los más pobres y los ancianos, menos informados de los efectos de los golpes de calor, son las principales víctimas, añadió. Según los expertos, probablemente el número de personas muertas sea aún mayor.
En el estado vecino de Telangana, donde las temperaturas alcanzaron 48°C durante el fin de semana, 340 personas fallecieron en los últimos días, contra 31 el año pasado.
En la capital Nueva Delhi, con temperaturas de hasta 45ºC, los hospitales tampoco daban abasto.
Para el Centro para la Ciencia y el Medio Ambiente (CSE), un organismo de investigación, el aumento repentino de las temperaturas podría explicar en parte este duro balance.
"Esto puede ser debido a la brusca variación de las temperaturas después de que en meses húmedos como febrero y marzo registraran otras más benignas", dijo Arjuna Srinidhi, responsable del programa sobre cambio climático del CSE.