La policía española registró la casa de Serafín Castellano.
ReutersMADRID.- El delegado del gobierno de Mariano Rajoy en la región de la Comunidad Valenciana, Serafín Castellano, fue destituido hoy tras haber sido detenido en una operación contra la corrupción, informó en rueda de prensa la vicepresidenta del Ejecutivo español, Soraya Sáenz de Santamaría.
La Fiscalía Anticorrupción investiga supuestas irregularidades en contratos que el ya ex delegado realizó durante su etapa como consejero de la Gobernación en el gobierno regional (2007-2014), que está en manos del Partido Popular (PP) de Rajoy desde hace 20 años.
Según informó la prensa nacional, la formación conservadora inició la suspensión cautelar de militancia para Castellano, que entre 2012 y 2014 fue "número dos" del PP en la Comunidad Valenciana.
La suspensión se produce tres semanas después de que también fuera apartado del partido el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, por otro escándalo relacionado con el supuesto cobro de comisiones ilegales.
Agentes de la Policía registraron desde primera hora de la mañana la vivienda de Castellano. También requirieron información a la consejería de Gobernación, según la prensa. En la operación fueron arrestadas otras ocho personas.
Al parecer, la investigación se inició a raíz de la denuncia de un contratista que alertó de irregularidades en la adjudicación y en la gestión de contratos otorgados por la consejería que dirigía Castellano a una empresa de servicios anti incendios.
La detención del ex delegado del gobierno se produce en un momento complicado para el PP de Rajoy, después de la debacle que sufrió el pasado domingo en los comicios municipales y regionales celebrados en España.
El partido registró una importante caída de votos en la Comunidad Valenciana, tradicional bastión de la formación, y todo apunta a que el partido perderá el gobierno en esa región, que podría pasar a manos de la izquierda a través de una coalición de fuerzas políticas.
La situación se repite en el Ayuntamiento de Valencia, capital de la región, donde el PP fue la fuerza más votada, pero sin alcanzar la mayoría absoluta. Castellano fue retratado el domingo en una fotografía muy difundida por los medios en la que se le veía dando consuelo a la hasta ahora alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, tras la debacle electoral