EL CAIRO.- Quince de los diecinueve países que forman la región del norte de África y Oriente Medio han reducido a la mitad su porcentaje de población con hambre, con lo que han alcanzado una de las metas de los Objetivos de Desarrollo del Milenio que expiran este año, informó hoy la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Según la FAO, que presentó hoy en El Cairo su primer informe sobre el hambre en esa zona, entre esos 15 Estados se encuentran Irán, Arabia Saudita, Egipto, Marruecos y Mauritania.
Por el contrario, Irak, Siria, Yemen y Sudán no pudieron lograr ese objetivo, debido a la crisis y los conflictos que asuelan estos países.
Pese a los avances conseguidos, el número total de personas con hambre en esta zona pasó de 16.500.000 en el inicio de los años 90 a 33 millones actualmente, debido en parte al aumento de la población en la región.
El subdirector general de la FAO, Abdesalam Uld Ahmed, dijo a que el informe pretende mostrar los avances conseguidos quince años después de su establecimiento en la aplicación del primer objetivo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que pretende erradicar la pobreza extrema y el hambre.
Esta agencia de la ONU precisa que el Magreb (Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Túnez) es la única área que ha erradicado completamente el hambre, al reducir la tasa de población que sufre esta situación a menos del 5 por ciento.
El Mashreq (Egipto, Irak, Irán, el Líbano, Siria, Jordania y Sudán), que es el área más poblada, acoge el mayor número de personas con hambre de la región.
La FAO precisó que casi 23 millones de personas padecen desnutrición en esa zona, lo que representa un 70 % del total de las personas con hambre en la región del Norte de África y Oriente Medio.
El documento señala que la desnutrición entre la infancia en esa zona llegó a un porcentaje global del 24,3 por ciento, pero destaca grandes diferencias entre países, ya que varía, por ejemplo, entre el 8 % en algunos Estados del golfo Pérsico y el 40 % en el Yemen o Sudán.
Revela que, además de hambre, se registraron altos porcentajes de obesidad en algunos países por culpa de la malnutrición, fenómeno que alcanzó una tasa regional del 23,6 por ciento, mientras que la media mundial es del 11,7.
Esta región, según el informe, afronta "desafíos excepcionales" que impiden conseguir la erradicación completa del hambre, como la escasez de recursos y el crecimiento de la población, además de las crisis que atraviesan algunos de sus países.
Asimismo, el texto da diez recomendaciones para hallar soluciones sostenibles a la desnutrición, entre ellas la disminución de la presión demográfica, la mejora del uso del agua de riego y la promoción de la investigación científica para aumentar la producción agrícola.