SANTIAGO.- Con el lanzamiento de la reedición de su primer trabajo en solitario, el ex Beatle, George Harrison, vuelve a sonar en las radios y a juntar un poco de dinero, aprovechando la exitosa venta del álbum "One", de The Beatles, que ha superado la suma de 6 millones de copias vendidas en todo el mundo.
"All things must pass" fue el primer disco de Harrison una vez que los Beatles se separaron en 1970. El álbum también es de ese año, lo que demuestra que los integrantes de la famosa banda ya estaban haciendo sus trabajos por separado, incluso antes de la disolución definitiva del grupo.
El larga duración, que es triple, contiene el mayor éxito de Harrison como solista, "My sweet lord", canción que le valió el reconocimiento mundial y un juicio que perdió a mediados de la década del '70 por un supuesto plagio. El tema en cuestión habría sido copiado de un viejo éxito de los años 60, llamado "Hes so fine", interpretado por un trío de mujeres de color llamado "The Chiffons". Harrison perdió el pleito y se vio obligado a pagar por su éxito.
Además de esta canción (titulada por algunos como demoniaca, puesto que el "lord" al cual se alude, sería el que tiene cachos y cola) se incluyen piezas rescatables como "What is life" y "Isnt that a petty". Lo demás, salvo el single dulzón llamado "Apple scrufs", es una colección de temas maratónicos que requieren la paciencia de un santo (ojalá hindú) para digerirlos, no olvidemos que por esa epoca el musico ya era un adepto total a la religión y cultura hindú, hábito que adquirio en 1966 cuando compuso la canción "Love you to", del álbum "Revolver", y que ha sido considerado recientemente como el disco número uno más importante de la historia del rock, desplazando al ya legendario Sgt. Peppers, de la misma banda.
Harrison, nacido el 25 de febrero de 1943 (es el menor de los cuatro Beatles), desde temprano mostro inclinación por la música. Ya a los catorce años tocaba la guitarra y a los 17 se había conocido con McCartney y Lennon los cuales, en palabras del mismo Harrison "eran dos tipos con un ego mayúsculo y que dejaban poco espacio a los demás".
"All things must pass" tardo seis meses en ser grabado. El último disco del álbum triple contenía sesiones con Eric Clapton, Dave Mason y Billy Preston (que ya había tocado con los Beatles en "Get back" y "Dont let me down"). Gracias a las alabanzas de la prensa, el disco se convirtió rápidamente en el número uno tanto en Inglaterra como en Estados Unidos, teniendo en cuenta el elevado precio de trece dolares con noventa y ocho centavos. Fue el regalo de navidad mas comprado.
Por ese entonces Harrison vivía en base a lo que le dictaba su nuevo guia espiritual, Bhaktivededanta Swami, lider de la sociedad internacional para la conciencia Krishna.
Ese ambiente de agua de pétalos de flores e incienso volvió a repetirse en el segundo álbum, "Living in the material world", de 1973, cuya situación comercial se vio salvada tan solo por la canción "Give me love".
Luego de este traspié, Harrison se liberó un poco de las ataduras orientales y encaró los álbumes "Dark Horse" y "33 1/3".
Los semi fracasos lo llevaron a alejarse de las salas de grabación y en 1976 editó un compilado de temas bajo el nombre pomposo de "The best of George Harrison", aunque el lado A estaba dedicado a sus canciones compuestas para The Beatles. Algo debía vender, ya que sus colegas John Lennon había sacado "Saved Fish" y Ringo, "Blast from your past", discos con los mas grandes éxitos obtenidos hasta el momento. McCartney lo haría en 1978 con "Wings greatest".
En 1981 volvió a grabar y lanza "Somewhere in England", con un éxito total como "All those years ago". Luego de eso vendría el long play "Cloud Nine", en 1987. Ahí se reunió con Clapton, Ringo Starr, Elton John y su gran amigo e inspirado músico, líder de la mítica "Electric light orchestra", Jeff Lynne.
"Ive got my mind set on you" fue el plato fuerte de la velada y la consagracion del artista en la decada del 80. Ocasionalmente incurriría con Clapton en las bandas sonoras de las tres primeras películas de la serie "Arma Mortal", pero de ahí a grabar un nuevo álbum... bueno.
Hoy, con el reestreno del film "A hard days night" en cines, y la popularidad "in crescendo" de los melenudos de Liverpool, no podría asegurarse que Harrison no va a volver a las andanzas.
