TURIN.- El Festival Internacional de cine de las mujeres de Turín, que concluyó hoy en Italia su 8va. edición, proclamó como vencedora del premio del Jurado a una película que -paradójicamente- se titula "La saison des hommes" (La temporada de los hombres).
El largometraje dirigido por Moufida Tlatli, una joven cineasta francesa de origen tunecino, trata del mundo de las mujeres en el Túnez de hoy.
La realizadora canadiense Lea Pool alcanzó el segundo lugar con su película "Emportez-moi".
El festival presentó nueve largometrajes a concurso, 20 cortometrajes, 11 documentales y seis obras fuera de concurso.
También dedicó una retrospectiva a Pratibha Parmar, una prometedora cineasta india que colaboró como voluntaria con la fallecida Madre Teresa de Calcuta.
"Hidden Whisper", de Vivian Chang (Taiwan), obtuvo la mención especial.
En la sección de cortometrajes, los trabajos que alcanzaron mayor consenso fueron "The Third Note", de Catriona McKenzie (Australia) -que cuenta la historia de una joven pianista ciega que logra comunicarse a través de la música-, en tanto que el segundo premio fue compartido entre "Jedertag", de Bianca Bodau (Alemania) y "Sammy Blue" de Kim Farrant (Australia).
El tercer premio fue para la israelí Sigalit Liphshitz con "Cock Fight", y la mención especial para "La promesa", de Patricia Chica (Canadá).
El jurado de la sección de documentales prefirió "Nu Shu. A Hidden Language of Women in China", de Yue-Qing Yang, un relato sobre la condición de inferioridad de las mujeres en China.
El segundo premio también fue compartido entre Margarida Ferreira de Almeida (Portugal) por "Let's Talk about It now" y "Le Jardin parfumé", de Yamina Benguigui (Francia), que describe historias relativas a las experiencias sexuales, muchas veces fustrantes, de las mujeres argelinas, marroquíes y francesas.
El premio del público seleccionó como mejor largometraje a "Nosotras", de Judith Colell (España), una ingeniosa propuesta que, a través del retrato de mujeres que viven en un mismo lugar, a veces sin conocerse siquiera, ofrece una visión de la sociedad española contemporánea.
El sábado el festival celebró una mesa redonda sobre "las mujeres y el deporte: obstáculos y nuevas metas", en la cual intervinieron grandes talentos del deporte italiano.
El mismo día se proyectó "Shadow boxers", de la norteamericana Katya Bankowsky, dedicada al mundo del boxeo femenino, una disciplina que desde hace dos semanas se ha permitido oficialmente también en Italia, cuando fue levantada la prohibición.
La película refleja, a partir de la historia de la revelación holandesa Lucia Rijker, este mundo desconocido e inusual, hecho a costa de grandes entusiasmos, sacrificios, miedos y desilusiones.
La directora del festival, Clara Rivalta, afirmó al concluir la reseña que el Festival fue "una ocasión única para contemplar el panorama del cine femenino de los cinco continentes".
