BERLIN.- El escritor alemán Martin Walser se quejó amargamente de la desaparición de las monedas europeas y la llegada del euro en un artículo publicado hoy por el periódico "Die Welt".
"El euro inaugura la era del práctico esperanto. El euro no es dinero, así como el esperanto no es una lengua", sostuvo el narrador alemán con motivo del inicio de la última temporada de verano previa a la introducción de la moneda única europea, el 1 de enero de 2002.
"El cambio de marcos a francos, pesetas y liras siempre ha sido una vivencia de libertad", explicó el literato, galardonado en 1988 con el Premio de la Paz de los Libreros Alemanes.
"Siempre se sabía exactamente el valor que uno tenía en marcos", argumentó, y destacó el encanto especial que revestía el hecho de gastar dinero en moneda extranjera. "No se puede pagar vinos franceses con marcos o euros ¿Comprar un Chateau Margaux con euros? ¡Qué horror!", opinó Walser.
"La diversidad debe desaparecer. Así como se extinguen los animales y las plantas, así se extinguen las divisas", ésa es la moraleja de la introducción del euro, sostuvo.
El escritor admitió que no puede imaginarse que el euro sea una moneda con aura. "Pero la tendrá. En el año 2084. O a más tardar cuando sea reemplazada por el mundo, el objetivo monetario mundial y global, la correspondencia material de una ética mundial que ya habrá sido proclamada y estará siendo practicada en cada banco o iglesia", vaticinó.
"¿Cómo frenar el asesinato de las monedas europeas?", se preguntó finalmente, sugiriendo con ironía un par de medidas de boicot: izar en Europa las banderas a media asta, no gastar dinero en efectivo o hacerlo solamente de forma virtual mediante la tarjeta o el chip.