SANTIAGO.- Marco Antonio de la Parra y Daniel Olave presentan este jueves 5 de julio su nueva obra,
"Pantalla prohibida" (Grijalbo), investigación relacionada con los mecanismos de funcionamiento, algunos irregulares según sus autores, del Consejo de Calificación Cinematográfica (CCC).
Por ejemplo, destacan excesos de atribuciones del CCC, realización de funciones que no están consignadas en la ley, miembros del Consejo que asumen ilegalmente roles que no les corresponden, falta de transparencia y control de los ingresos económicos del CCC.
En este documento,
emol.com entrega en exclusiva dos capítulos del libro, titulados
Vergüenza nacional y y
Prohibida obsesión. Este último se refier a cómo ha incidido el contenido sexual y político en la vara reglamentaria de la calificación de edad y permiso de exhibición de filmes extranjeros.
PROHIBIDA OBSESION
"Revisando la lista (que según la cifra oficial llega a las 884 películas entre 1972 y el 2000), se puede apreciar la gran obsesión del Consejo por los temas sexuales. Películas que hoy resultan incluso ingenuas, fueron lapidariamente censuradas debido a sus desnudos o sus temáticas eróticas. Y eso afectó tanto a pobres producciones italianas y a algunos títulos del destape español, como a obras de Federico Fellini, Bernardo Bertolucci, Paul Schrader, Tony Richardson, Woody Allen, Pedro Almodóvar, Andrzej Zulawski, William Friedkin, Luis García Berlanga, James Ivory, Franklin J. Schaffner, Lina Wertmuller, Liliana Cavani, Vicente Aranda, Ken Russell y Nicolas Roeg, entre otros.
En 1974 fue censurada por inmoral y grosera "El Ultimo Tango en París", de Bertolucci, cinta que provocó gran polémica y que varios años después fue recalificada. Esto, a pesar de que en una actitud muy mundana, el miembro de la Junta de Gobierno, el general de Aviación Gustavo Leigh comentó en esos días: "La vi en el extranjero y la habría aprobado".
El sexo fue también el motivo por el que los chilenos no pudimos ver -y aún no podemos- el popular clásico del softcore, "Emmanuelle". Tampoco la gran cantidad de secuelas bastardas de esa película que inundaron el mercado del cine mundial aprovechándose del éxito de la primera, protagonizada por Sylvia Kristel. Hay al menos una decena de otras "Emanuelle" -con una sola m- que trataron de ingresar al país, entre ellas la serie de la "Emanuelle Negra". Al mismo director de la original, Just Jaeckin, también le rechazaron la ya clásica y refinadamente erótica "La Historia de O"; además de su historia de una famosa prostituta francesa, "Madame Claude", y su posterior secuela.
Por temáticas de corte sexual, fue prohibida "Más Allá del Valle de las Muñecas", de Russ Meyer; "Pink Flamingos", de John Waters; "Juegos de Amor", de Nicolas Roeg; "The Bitch", con Joan Collins; "Volvamos a Querernos" (Je T'Aime Moi No Plus), con Jane Birkin; "La Fiesta Salvaje", del correcto y respetado James Ivory; "De Tamaño Natural", del destacado realizador español Luis García Berlanga; así como el estilizado filme de vampiros, "El Ansia" (The Hunger), de Tony Scott, donde Catherine Deneuve y Susan Sarandon protagonizan una famosa escena lésbica.
La lista de títulos pseudo-eróticos, que hoy no escandalizarían y probablemente tampoco entusiasmarían a nadie, es muy larga. Incluye muchísimas películas italianas (entre ellas, varias de Laura Antonelli y, especialmente, de Edwige Fenech), otras francesas, norteamericanas, españolas y argentinas. De este último país se rechazaron filmes de dos grandes divas del cine transandino: "La Piel del Deseo", con Susana Giménez y las películas "Carne y Fuego", de Isabel "Coca" Sarli, máximo símbolo erótico del cine de su país.
Famosos erotómanos italianos como Tinto Brass (con "La Llave") y Marco Ferreri ("El Futuro Es Mujer"), también quedaron en el camino, así como el español Vicente Aranda, el mismo de quien hemos visto "Amantes" y "La Pasión Turca". A él le prohibieron dos de sus primeras películas, "Cambio de Sexo" (1977), con Victoria Abril y Bibi Andersen y "La Muchacha de las Bragas de Oro" (1980), otra vez con Victoria Abril y el chileno Lautaro Murúa (el mismo de "Alias Gardelito").
Hasta Woody Allen quedó de pervertido. Su comedia "Todo lo que Usted Quería Saber acerca del Sexo (Pero Temía Preguntar)", donde se reía de la obsesión por el tema a través de una serie de graciosos sketches, está prohibida en Chile, aunque como muchas de las películas de la lista, es posible verla seguido a través del cable.
Es lo que sucede con "¿Dónde Está Mi Hija? (Hardcore)", de Paul Schrader, guionista de Martin Scorsese en filmes como "Taxi Driver" y "La Ultima Tentación de Cristo", que también ha desarrollado una importante carrera como realizador. Protagonizada por George C. Scott, narra la dramática búsqueda que un padre hace de su hija, desaparecida en medio del oscuro mundo de la pornografía más descarnada. El filme fue prohibido, a pesar de que realiza una fuerte denuncia contra el submundo de la explotación de menores y de que una de los miembros del Consejo, jueza de menores, dijo que lo que mostraba la película no era nada comparado con lo que ella veía a diario.
(...) Una de las primeras atribuciones que se tomó el CCC fue, pasando por encima de su propio reglamento que inhabilita para revisar material ya calificado, prohibir algunas películas que habían sido aprobadas en los tiempos de la Unidad Popular. Así, censuró "Z", de Constantin Costa-Gavras (ganadora del Oscar a la mejor película extranjera) y "Los Carabineros", de Jean Luc-Godard, obviamente por razones políticas.
Otro caso digno de mención fue la insólita e irregular prohibición de la película estadounidense "El Violinista en el Tejado", de Norman Jewison. Aunque el Consejo ya la había aprobado, fue el propio ministro de Educación -un militar- quien, pasando por encima de la resolución del CCC, prohibió su estreno por encontrarla subversiva.
(...) Hay otros casos de presión "indirecta", ejercidas contra algunas películas, como el de la producción argentina "La Historia Oficial", ganadora del Oscar al mejor filme extranjero. Norma Aleandro y Héctor Alterio protagonizaban este drama sobre los hijos de los desaparecidos que dirigió Luis Puenzo y donde también tenía un papel el chileno Patricio Contreras. A pesar de lo delicado del tema para esos días, un distribuidor se arriesgó y en forma personal trajo la película. Aunque pasó la censura, el único cine que la exhibió -el Lido- contó constantemente con presencia policial uniformada en su puerta, amedrentando a los posibles espectadores.
Otra polémica que tuvo lugar en el Consejo por esos días, tuvo lugar cuando debieron revisar la película "Pascualino Siete Bellezas", de la realizadora alemana Lina Wertmuller. El protagonista (Giancarlo Giannini), un socialista italiano, debe tratar de sobrevivir a cualquier costo en un campo de concentración nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Cuando la discusión entre los consejeros no llegaba a ninguna parte y parecía un hecho que iba a ser rechazada, la legendaria crítica de cine y directora de la revista "Ecran", María Romero, se levantó indignada y luego de dar su voto favorable a la película, dijo que si se llegaba a censurarla, "se cometía un asesinato en contra del cine". Luego se fue y la aprobación ganó por tres votos a dos (...).
Capítulo de adelanto "Vergüenza nacional"
Hablan Marco Antonio de la Parra y Daniel Olave