Daniel Quiroga
El domingo 9 de septiembre, en el Monasterio Benedictino de Las Condes, ante un público que repletó el templo, la soprano Magdalena Amenábar (Premio de la Critica 2000), en su constante interés por dar a conocer partituras olvidadas, presentó su trabajo interpretativo para el hermoso "Stabat Mater", de Luigi Boccherini (1743-l808).
El dolor de María junto a Cristo crucificado ha sido en todos los siglos materia del arte. La artista escogió la versión de Boccherini, original rescatado de l78l, para voz de soprano y conjunto instrumental de cuerdas (dos violines, viola, cello, viola da gamba). La cantante lleva el doloroso texto, a lo largo de intensos cuarenta y cinco minutos ininterrumpidos, durante los que el compositor exalta el dramatismo con exigencias de amplio registro, variedad de adornos melódicos y constante fuerza expresiva.
La parte vocal fue desarrollada admirablemente por Magdalena Amenábar con la voz segura y rica en matices que la distingue. Los instrumentos deberían apoyar con igual seguridad el relato latino, lo que no siempre se logró. Es de esperar que tan interesante y difícil obra —presentada en estreno para Chile— se pueda oír otra vez en un sitio más accesible al público masivo.