BRASILIA.- Los hechos vividos por la cantante mexicana Gloria Trevi en los casi dos años de reclusión han reavivado la apertura de una investigación sobre la situación de los centros penitenciarios y las condiciones en las que viven los presos, manifestaron el jueves a la AP autoridades del Parlamento.
El presidente de la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados, Inaldo Leitao, dijo que una comisión de parlamentarios solicitará al Gobierno una profunda investigación sobre el caso Trevi, para sancionar a los responsables de abusos que sufren los presos por parte de sus guardianes.
La cantante mexicana, quien está embarazada de 7 meses, reveló a una comisión de diputados en la cárcel de la Papuda, que sufrió reiteradas violaciones y acoso sexual por parte de policías, entre ellos algunos jefes, en el interior de la penitenciaría de la Policía Federal de Brasilia.
"El caso Trevi es uno más que se suma a las permanentes denuncias de reclusos, por los abusos que sufren en el interior de las cárceles por parte de los agentes penitenciarios y de otros detenidos", agregó.
Sobre el caso Trevi subrayó que las denuncias de la cantante "son de extrema gravedad" porque los abusos involucrarían a influyentes jefes policiales que abusaron del poder que les fue conferido para resguardar por la seguridad de las cárceles.
El diputado de la comisión de Derechos Humanos, Bispo Rodrigues, manifestó que Trevi confesó a los parlamentarios: "No grité, no luché, pero no consentí tener sexo con ellos".
Si bien Trevi dijo que era conducida a una oficina del penal de la Penitenciaría para someterse a las exigencias sexuales de un comisario encargado del penal, se abstuvo de revelar el nombre. Solamente señaló que es "un personaje de mucha influencia en la Policía y difícilmente será sancionado".
Inicialmente la cantante se abstuvo de confirmar las causas de su embarazo. Informó a los magistrados del Poder Judicial que fue víctima de una violación, pero sin revelar si los autores eran agentes penitenciarios o presos.
Tras esas revelaciones, el abogado de Trevi, Geraldo Magela, solicitó al ministro de Justicia, Aloysio Nunes Ferreira, garantías para la seguridad de la mexicana, detenida en la Papuda desde fines de septiembre junto a su empresario Sergio Andrade y su colaboradora María Raquenel Portillo.
Los tres esperan la conclusión de los procesos legales para ser extraditados a México o beneficiarse con el refugio político en Brasil. En México deben responder a un proceso por rapto, violación y corrupción de menores.
Rodrigues señaló a la AP que la Trevi ratificó a los parlamentarios que no se someterá a pruebas genéticas de ADN para establecer la paternidad de su hijo. Agregó que la cantante informó que será su hijo en su mayoría de edad quién decida si quiere saber o no quién es su padre.
Un informe de la PF señaló los pasados días que el embarazo de Trevi fue producto de una "inseminación artificial artesanal" mediante la aplicación de semen cargado en una jeringa.
La Policía sostuvo que el objetivo de la cantante era embarazarse para tener un hijo brasileño que impida legalmente su extradición a México, donde dijo que su vida correría peligro.
Sobre Trevi, Andrade y Portillo está pendiente el cumplimiento del dictamen de extradición emitido por la justicia brasileña en diciembre pasado hasta que el Comité Nacional del Refugio (Conare) se manifieste sobre el pedido de refugio político.