LONDRES.- La cantante y actriz estadounidense de origen puertorriqueño Jennifer López no podrá cenar nunca más en el restaurante londinense "The Ivy" luego de un escándalo que protagonizó el año pasado, informó hoy el diario británico "The Mirror".
Los extravagantes requerimientos de la superestrella fueron reproducidos ampliamente por la prensa popular británica cuando López visitó Londes en noviembre para participar en un programa de televisión y otros eventos.
Ahora "The Mirror" logró hacer hablar a los empleados del local, donde los mortales normales deben hacer reservas con meses de anticipación.
Según dijeron, López, de 31 años, tiene prohibida la entrada al restuarante luego de cambiar tres veces su reserva en una noche, enviar a sus guardaespaldas a limpiar el lugar y esperar que todo el mundo se adaptara a ella.
Los directivos de "The Ivy", en el elegante barrio de Covent Garden, mostraron a tres de los guardaespaldas la puerta luego de que éstos entraran violentamente a barrer todo el local.
Un empleado de la cantante llamó entonces para cancelar la reserva -que ya había sido cambiada varias veces- señalando que la estrella prefería cenar en su hotel.
"Se le dijo al asistente que, en lo que concierne a "The Ivy" ella podía comer en el hotel el resto de su vida (...) Jennifer López dejó de existir para "The Ivy"", cita el "Mirror" las palabras de los directivos del local.
Entre los clientes habituales del restaurante figuran David y Victoria Beckham, Hugh Grant y Liz Hurley, George Michael y Kenny Goss, Madonna y Guy Ritchie, Sting y Trudie Styler, Elton John y David Furnish, Liam Gallagher y Nicole Appleton, Kevin Spacey y Jack Nicholson.
