Lo de Axe Bahía no deja de sorprender. Llegaron a Chile siendo un grupo de absolutos desconocidos y en poco tiempo se convirtieron en uno de los referentes principales de jóvenes y jovencitas que imitan sus coreografías y sus cortes de pelo.
Y por si fuera poco, esta noche en la Quinta Vergara no sólo consiguieron una ovación cerrada en la platea, sino que además alcanzaron un rating histórico en la era del People Meter, para una transmisión del Festival de Viña.
Fueron 66 puntos a las 23:36 horas, cuatro puntos más que los 62 que consiguieron Melón y Melane cuando el Festival lo organizaba Megavisión.
Fue una velada demasiado estimulante para estos chicos que descargaron toda la tensión acumulada llorando desconsoladamente frente a los periodistas durante la conferencia de prensa.
"Tenemos tres cosas que agradecer esta noche" dijo Jeferson, uno de los pocos que pudo hablar. "A Dios, porque le debemos todo, a nuestras familias, y al público chileno", dijo en medio del llanto desconsolado de Flaviana y Bruno, que no podían contener las lágrimas.
Era tanta la emoción, que fue poco más lo que pudieron decir. Reconocieron que tuvieron miedo cuando vieron que a las Meninas no les había ido bien la noche anterior, pero se mostraron enormemente agradecidos del recibimiento que les dio el público esta noche.
Aclararon de paso que Tapinha no es un tema de As Meninas, y que ellas sólo hacen un cover de la canción original, que es la que ellos bailan, Sin embargo aclararon que son fans de As Meninas y de la cultura brasileña en general.
Con respecto a su actuación en la Quinta, dijeron que "no nos importa no habernos ganado la antorcha. No vinimos hasta aquí para eso. Nosotros llegamos a Chile siendo unos desconocidos, y ya el hecho de haber llegado a Viña es el mayor premio al que podemos aspirar", dijo Flaviana cuando pudo contener el llanto.
Después la rubia y líder del grupo confesó que tenían planes de expandir su éxito a otros países. Pero en lo inmediato, reconocieron que les encantaría bailar también en la noche de clausura. Y por la rapidez en que han venido quemando etapas, no sería nada de raro que lo hicieran.