SANTIAGO.- El co-fundador y ex bajista de la banda de rock británica "Pink Floyd" llegó a Chile esta tarde para el concierto que ofrecerá mañana martes en el Estadio Nacional, luego del retraso que sufrió la línea aérea aérea que lo trasladó desde Johannesburgo, Sudáfrica, hasta Sao Paulo, Brasil, donde abordó otro vuelo para llegar al país y cumplir con el evento programado.
Roger Waters llegó acompañado de un equipo compuesto por 37 personas, entre ellos 10 músicos, incluyendo su hijo Harry Waters, de 25 años, tecladista de su grupo.
Su paso por Chile corresponde a la segunda fecha de la gira "In the Flesh", una de las visitas más esperadas por los fanáticos de Pink Floyd, que prometen copar las localidades del Estadio Nacional.
Para su única presentación en el país, mañana a las 21 horas, se está levantando en el Estadio Nacional un escenario de 12,5 metros de alto, por 22 de ancho y 27 de fondo, que será complementado con tres pantallas gigantes para que ningún espectador se pierda los detalles visuales del recital.
En Chile, Waters se alojará en la habitación presidencial del hotel Hyatt. Durante su estada, el cantante ha exigido una masajista especialista en pies y acupuntura (para que le sacuda las tensiones del largo viaje), una limusina para sus traslados y una cancha de golf cerca del mar.
