Nueva York.- Tres años después del estreno del primer episodio de "La Guerra de las Galaxias", los fanáticos de la saga de George Lucas están listos para volver a ser transportados al mundo de ciencia ficción más lucrativo de la historia de Hollywood.
En el nuevo film, Anakin, personificado por el canadiense Hayden Christensen, es un joven ambicioso y talentoso de veinte años que está aprendiendo bajo la tutela de su maestro, Obi-Wan Kenobi, protagonizado por Ewan McGregor.
Según la trama, Anakin pone en juego su status de caballero jedi, cuya agrupación prohíbe las relaciones carnales, cuando se enamora de la princesa Padmé Amidala, encarnada por Natalie Portman. De esa unión provienen Luke y la princesa Leia, protagonistas de los primeros tres epidosios estrenados en 1977, 1980 y 1983.
Amidala y Anakin se unen al senador Palpatine (Ian McDiarmid) para luchar contra el jedi rebelde Dooku (Christopher Lee), mediante un ejército de clones.
Para el creador de la saga, George Lucas, lo importante es que cada película de la serie sea lo suficientemente exitosa en la taquilla como para permitirle filmar el siguiente episodio. Esto ha probado ser la regla hasta el momento, con más de mil millones de dólares recaudados en total por las cuatro primeras películas.
Pero a pesar de que se enfrenta a una dura competencia esta temporada, con estrenos muy anticipados como "El Hombre Araña", "Men in Black II", "Austin Powers" y el nuevo film de Steven Spielberg, "Minority Report", protagonizado por Tom Cruise, el film de Lucas es el más esperado del verano del hemisferio norte.
"El Ataque de los Clones" se diferencia de sus antecesores debido a que fue realizada por completo de forma digital. Además, está poblada por numerosas criaturas generadas por computadoras, como el ya bien conocido Yoda, Watto y Jar Jar Binks.
En esta versión, Yoda no es más el muñeco manipulado por Frank Oz, que aparecía en las anteriores entregas. El personaje es completamente digital, gracias al trabajo del supervisor en animación Rob Coleman y su equipo de creativos.
Sin dudas, "El ataque de los clones" es la película más ambiciosa de la saga, en relación a sus características técnicas. Para Lucas, los avances tecnológicos utilizados en el film pueden ser comparados con el fin de las películas mudas y la utilización del color.
Los técnicos de Lucasfilm, Panavision y Sony unieron esfuerzos para desarrollar una serie de lentes y cámaras sofisticadas que permiten que las imágenes digitales reemplacen a las tradicionales en la cinta de 35mm.
El resultado es una imagen sumamente clara que da un brillo diferente a la ciudad de Coruscant y a la geografía del planeta Naboo, hogar de Amidala.
A pesar de no esconder su pasión por los detalles de la técnica, Lucas y el coautor del guión, Jonathan Hales, pusieron gran énfasis en la historia. En esta versión, Obi-Wan se convierte en la autoridad moral que representa en cintas anteriores, mientras que Anakin deja entrever las debilidades que más tarde lo llevarán a cambiar de bando.
El Anakin de "El ataque de los clones" es un joven atractivo, lleno de contradicciones. El personaje respeta las normas éticas de los jedi pero al mismo tiempo trata de eludir sus responsabilidades. Para el final de la película, Anakin es aún decente y está a varios años de distancia de convertirse en el maléfico Darth Vader.
Según Lucas, Anakin se convierte en Vader porque se aferra a las cosas. "No puede olvidar a su madre, no puede dejar a su novia, no puede desprenderse de lo material. Esto lo convierte en una persona ambiciosa, y cuando uno es ambicioso, termina encaminándose hacia el lado oscuro, porque tiene miedo de perder sus posesiones", afirmó el cineasta.
Además, el director explicó que la república pasa a ser un imperio por culpa de la corrupción. "Todas las democracias se convierten en dictaduras, cuando las mismas personas le dan la oportunidad de gobernar a un dictador. Esto sucedió con Julio César, Napoleón y Hitler", dijo.
En el episodio II, Lucas pone énfasis en esto. "Este es uno de los temas que estoy estudiando: ¿cómo la república se convierte en un imperio? Esto es paralelo a la pregunta de cómo Anakin pasa a ser Darth Vader, cómo una persona buena resulta mala o cómo una democracia termina en una dictadura", expresó.
Las palabras de Lucas explican la conexión entre la trilogía de Anakin y la trilogía de Luke: el imperio resulta de la corrupción dentro de la república y la necesidad de combatirla.