PARIS.-"La Rabia y el Orgullo" de Oriana Fallaci, publicado en francés, suscitó la indignación de representantes de las comunidades religiosas y ásperas críticas del filósofo Bernard-Henri Levy y de Gilles Kepel, uno de los máximos especialistas del Islam, en las columnas de Le Monde.
El filósofo lo define sin vacilaciones como "un libro racista" y afirma que "la lucha contra el integrismo no se realiza así, estigmatizando a mil millones de hombres y mujeres y poniendo en la misma categoría a todos los musulmanes". Fallaci ’’mezcla todo con la misma carga de odio’’, afirmó el filósofo que desde hace años sostiene que la lucha contra el integrismo es una de las máximas urgencias.
También Gilles Kepel, autor de "Jihad, expansión y declinación del islamismo", critica la amalgama efectuada por la periodistas y se indigna por el modo en que describe a los "hijos de Alá".
El libro y su éxito "no son de buen augurio para el nivel de reflexión colectiva después del 11 de septiembre". La indignación también es fuerte en las comunidades religiosas.
El libro "es una provocación sobre el Islam escrito por una periodista que desde siempre cultivó la provocación y que expresa el mismo fanatismo que pretende denunciar", dijo el rector de la mezquita de París, Dalil Boubakar.
Del mismo modo católicos y protestantes rechazaron a Fallaci. El padre Jean Marie Gaudeul, responsable del Secretariado para las relaciones con el Islam de la iglesia católica, reveló que la descripción de la historia del Islam de la periodista "es falsa" y refirió sólo "los pasajes guerreros" que están presentes también en la Biblia.
El presidente de la Federación protestante, Jean-Arnold de Clermont, se indignó por el hecho de que el libro fue publicado en Francia "en un momento en que la integración es un tema fundamental".
