PARIS.- Oscar de la Renta, cuyos elegantes trajes de noche le han ganado numerosas admiradoras a ambos lados del Atlántico, presentará el martes por última vez su colección en París.
El diseñador dominicano-estadounidense presentará una colección de otoño-invierno al estilo ruso en el Museo de Artes Decorativas, en un desfile que marca el fin de su sociedad con la marca francesa Balmain, según Chantal Vizioz, una portavoz de la empresa.
De la Renta continuará su línea de ropa y su perfume, Oscar de la Renta, en Nueva York, donde reside y donde Oscar de la Renta Ltd. tiene su sede, indicó Vizioz.
"El posee una gran empresa en Estados Unidos que continuará funcionando", agregó.
El contrato de 10 años del diseñador con Balmain expira el martes, dijo Vizioz, quien no explicó por qué el contrato no fue renovado.
De la Renta fue contratado por Balmain en 1993 para encargarse de sus trajes de lujo, convirtiéndose en el primer dominicano-estadounidense en diseñar para una casa francesa de alta costura, según un comunicado emitido por Balmain el lunes.
De la Renta salió de República Dominicana a los 18 años para estudiar pintura en Madrid, donde descubrió su talento para el diseño de modas.
Tras una pasantía con el modisto español Cristóbal Balenciaga, de la Renta se mudó a Francia y se convirtió en un asistente de costurero en la empresa Lanvin, en París.
De la Renta fue a Nueva York en 1963 para diseñar la colección de lujo de Elizabeth Arden. Dos años más tarde, comenzó a trabajar para Jane Derby Co., donde posteriormente comenzaron a diseñarse prendas con la etiqueta de Oscar de la Renta.
De la Renta cobró fama poco tiempo después y ayudó a lanzar modas étnicas en la década de 1970 con sus aclamadas creaciones rusas y gitanas. También se ganó el corazón de las damas de alta sociedad por sus elegantes vestidos de cocktail, que transmitían lujo sin ostentar.
De la Renta suele emplear costosas telas como la seda, y es audaz en el uso de colores como rojo, verde y rosa.
Sus clientes incluyen a las ex primeras damas estadounidenses Hillary Clinton y Jackie Kennedy Onassis.
