SANTIAGO.- La temporada lírica 2002 del Teatro Municipal ofrecerá este mes su quinto y penúltimo título, la ópera en cuatro actos (refundidos en tres), "Adriana Lecouvreur", del compositor italiano Francesco Cilea (Palmi 1866-Varezze 1950), con libreto de Arturo Coulatti, basado en un drama de E. Scribe y E. Legouve.
Adriana Lecouvreur se representará los días miércoles 18 (función de gala oficial de Fiestas Patrias), sábado 21, lunes 23, jueves 26 y sábado 28.
La mayor atracción de esta ópera, en la versión 2002, será la presencia de la gran soprano chilena Verónica Villarroel, quien luego de tres años de ausencia (lo último que interpretó en Chile fue Maria Stuardo de Gaetano Donizetti) regresa a renovar el cariño por su publico.
Ella y los demás integrantes del elenco, mas músicos y técnicos, fueron presentados a la prensa en la Sala La Capilla del Teatro Municipal.
Junto a la eximia cantante, triunfadora en todos los escenarios del mundo (quien interpretará el rol de Adriana), estarán en el escenario del Municipal, el tenor italiano Mario Malagnini (Mauricio), la mezzo soprano de la misma nacionalidad Luciana DoIntino (Princesa Bouillon) y el barítono, también italiano, Massimiliano Gagliardo (Michonnet).
La conducción de la Orquesta Filármonica de Santiago estará a cargo del maestro chileno Maximiliano Valdés, a contar del presente mes nuevo director titular de la agrupación.
En la parte coral, la agrupación del Municipal estará nuevamente con la dirección del uruguayo Jorge Klastornick.
En tanto, la regie ha sido entregada a la soprano lirica Renata Scotto, quien ayudó en gran medida a impulsar la carrera de Verónica Villarroel y a quien la cantante nacional considera como su madrina musical.
La escenografia y vestuario serán de responsabilidad del artista chileno Pablo Núñez y la iluminación, de Jose Luis Fiorruccio.
El argumento de esta ópera, una historia de amores, venganza y muerte, gira en torno a la célebre actriz trágica Adriana Lecouvreur, máxima atracción de la Comedia Francesa, amante del popular guerrero y político Mauricio de Saxe, este último en realidad un aristócrata de la corte francesa del siglo XVIII.
Su enamorado se debate entre dos damas que lo pretenden, la actriz y la princesa de Bouillon, quien finalmente envenena a Adriana.
Verónica Villarroel ha asumido el desafio de debutar en Chile en el rol de Adriana de esta ópera, la cual ha sido representada -con gran éxito en el Municipal de Santiago- en varias ocasiones, a partir de su estreno el 4 de julio de 1903, a solo siete meses de su estreno mundial en el Teatro Lírico de Milan con Enrico Caruso y Angélica Pandolfini como protagonistas.
