LONDRES.- La segunda película sobre el pequeño mago Harry Potter, el personaje imaginado por la escritora británica J.K. Rowling, es mucho más oscura y terrorífica que la anterior, y sin duda pondrá los pelos de punta a miles de niños en todo el mundo.
"Harry Potter y la Cámara de los Secretos’’, pre-estrenada hoy en Londres y que aparecerá oficialmente en cartelera el próximo 15 de noviembre, cuenta cómo el intrépido Harry debe hacer uso de todos sus poderes para descubrir el origen de una siniestra fuerza que penetra en la escuela de magia y brujería Hogwart, donde estudia.
Mientras que la exitosa "Harry Potter y la Piedra Filosofal", el primer filme de la serie, tuvo que introducir a todos los personajes de la historia, esta segunda película entra de lleno en la aventura.
El director, Chris Columbus, presenta un largometraje de acción que nunca aburre, porque está repleto de efectos especiales como coches voladores y una emboscada de arañas gigantes.
A pesar de su larga duración -dos horas y cuarenta minutos-, con tantas novedades las legiones de seguidores del pequeño prestidigitador no tendrán ni un segundo de respiro.
Daniel Radcliffe continúa en su papel de Harry Potter, esta vez más crecido y con la voz más grave.
El joven actor insinuó hoy, para decepción de sus admiradores, que quizás no interprete al mago en la tercera entrega de la serie.
Sus amigos en la ficción siguen siendo Ron Weasly, interpretado por Rupert Grint, y Hermione Granger, la actriz Emma Watson.
Una de las estrellas del filme es Kenneth Branagh, impecable en su papel del profesor de arte Gilderoy Lockhart, un personaje cómico obsesionado por su imagen y desesperado por disimular sus nulos conocimientos en magia.
"La Cámara de los Secretos" difícilmente alcanzará el éxito de su predecesora, que fue la película más taquillera de la historia del cine después de "Titanic", pero los pequeños privilegiados que hoy asistieron al pre-estreno en Londres dijeron que, aún así, no hay que perdérsela.