ROMA.- El tenor italiano Luciano Pavarotti habló con uno de sus mejores amigos sobre su desdicha por la muerte de uno de los mellizos que esperaba de su pareja Nicoletta Mantovani, según informa hoy el diaro italiano "La Repubblica".
Le dijo que se sentía como "un hombre desgraciado" que ha sufrido "uno de los peores días de su vida".
"Luciano está acongojado y rendido. A uno no le queda más remedio que tenerle lástima", señala Andrea Strata, el nutricionista personal de Pavarotti, y uno de sus amigos más cercanos.
Los médicos en Bolonia emitieron un comunicado el miércoles anunciando que Mantovani había dado a luz a una niña el día anterior. Señalaron que se vieron forzados a realizar una cesárea tras descubrir que uno de los mellizos que esperaba, el niño, no estaba recibiendo suficiente oxígeno y que había sufrido un paro cardíaco.
Pese a los riesgos que significaban el nacimiento de los mellizos, que en principio estaba previsto para febrero, durante los últimos días Pavarotti parecía que estaba "en calma, feliz y animado", según sus amigos.
El tenor, que ya es padre de tres hijas, nacidas de su anterior matrimonio con Adua Veronesi, estaba entusiasmado con la idea de tener su primer hijo varón, agrega el diario.
Pavarotti, además, tiene una hermana y una nieta, hija de su hija Cristina, de 38 años.
Mantovani, ex secretaria del tenor, tiene 33 años y vive con el cantante desde 1996. En cierta ocasión dijo: "Quiero un hijo de Luciano, así él no será el único hijo como fue mi caso".
Su sueño se truncó el martes, cuano del doctor Luciano Bovicelli del Policlínico S. Orsola, en Bolonia, descubrió que el pequeño había muerto dentro del vientre de la madre.
Bovicelli reveló que inicialmente Mantovani esperaba trillizos, pero que uno de ellos no se llegó a desarrollar.
"Se malformó la placenta que le tendría que haber nutrido. Es un caso raro que puede acarrear riesgos para tanto para la madre como para los bebés", explicó el médico, quien agregó que Mantovani conocía el riesgo y tuvo "mucho coraje" al decidir seguir adelante con el embarazo.
Alicia, que nació en la madrugada del marte, varias semanas antes de lo previsto, pesó sólo 1,75 gramos, pero según el personal del hospital se encuentra en buen estado.
La muerte del que hubiese sido su primer hijo, es el último de los tristes momentos que Pavarotti, de 67 años, ha vivido en el transcurso de los 12 meses pasados. En el 2002 perdió a su madre Adele y a su padre Fernando.
En mayo concluyó un largo, y no menos costoso, proceso de divorcio de su anterior esposa y unos días después, el tenor enfureció al público del Metropolitan de New York al cancelar una actuación por una gripe, horas antes de salir al escenario.
El año pasado también tuvo que pisar los tribunales acusado de evasión de impuestos en Italia, cargos de los que fue absuelto, y despidió a Herbert Breslin, tras 35 años de colaboraciones.
Cuando parece que su gloriosa carrera se está aproximando a su fin, Pavarotti quizás encuentre algo de consuelo en su recién nacida. Y los doctores han señalado que pese a los duros momentos vividos esta semana, Nicoletta podrá tener más hijos en el futuro.
