LONDRES.- Los actores Catherine Zeta Jones y su marido, Michael Douglas, vendieron las fotos de su boda a la revista "OK!" por dinero y no para proteger su intimidad, declaró hoy ante los tribunales el dueño de "Hello", Eduardo Sánchez.
"Ellos ofrecieron la exclusiva de la boda a varios medios, incluidos nosotros mismos, no con el fin de proteger su intimidad, sino para comenzar una carrera que fuese elevando el precio de dicha exclusiva", afirmó Sánchez durante el juicio por la demanda de los actores contra su revista.
"Hello!" publicó las fotos "robadas" de la boda, celebrada en noviembre de 2000, después de que la pareja hubiese firmado la exclusiva con el magazine "OK!" por 1,6 millones de euros.
Zeta-Jones y Douglas demandaron a "Hello!" por 800.000 euros, mientras que "OK!" lo hizo por casi 2,7 millones.
Según el responsable de "Hello!", las razones de algunas parejas para vender las exclusivas de sus bodas incluyen cubrir los costes de la celebración, cobrar tanto como sea posible, controlar la publicidad y proteger su propia imagen.
"De todos modos, para los que quieren proteger su intimidad, ésta no es la forma, porque se supone que las fotos pueden acabar publicadas en cualquier revista del mundo", añadió.
Sánchez puso ejemplos de parejas famosas que no hicieron negocio con su boda, como Brad Pitt y Jennifer Aniston o Madonna y Guy Ritchie, y afirmo que "en estos casos, el interés de los medios no fue tan grande como el que provocó la boda de Zeta-Jones y Douglas".
El dueño de "Hello!" concluyó diciendo que han sido muchas las parejas de famosos que han vendido la exclusiva de su boda a su revista y que hasta ahora nunca habían tenido problemas con ninguna de ellas.
El juicio, que empezó el día 3, continuará la semana próxima.
