ASUNCIÓN.- El pastel de la boda del sábado entre el cantante mexicano Cristian Castro y la joven paraguaya Gabriela Bo pesará 100 kilos y estará adornado con cintas de plata, mientras que los 300 invitados locales y extranjeros recibirán como recuerdo de su asistencia a la ceremonia una cámara fotográfica desechable.
Los detalles de los festejos del acto, considerado por la prensa asunceña como "la boda del año", son divulgados diariamente por programas radiales y televisivos, pero los miembros de la familia Bo guardan hermético silencio al respecto.
La ceremonia civil se cumplirá a las 22:00 hora local en la residencia que posee la familia Bo en la periferia de la capital paraguaya. A la ceremonia no tendrán acceso los periodistas, lo cual no ha impedido que hayan comenzado a llegar ya decenas de ellos, principalmente provenientes de México y Argentina.
La torta de 100 kilos será preparada en la panadería de una tía de Gabriela y aparte de las cintas de plata tendrá otros decorados con dibujos del sol, la luna y corazones, según las versiones circulantes. Además, en el centro llevará las iniciales de los novios.
El regalo para los invitados fue una idea, según los programas radiales, de Dolores, la hermana mayor de Gabriela, para facilitar a los asistentes tomarse sus propias fotografías durante los festejos.
Unos 50 familiares, amigos y artistas argentinos y mexicanos de los novios deberán llegar aquí entre el viernes y sábado. La familia Bo contrató para ellos dos hoteles de menor categoría que el Excelsior, que es de su propiedad.
Cristian lucirá un traje de cola blanca, presuntamente el mismo que vistió en uno de sus últimos conciertos en los Estados Unidos.
Gabriela exhibirá un vestido blanco confeccionado por la modista argentina María Vázquez cuyo costo se ha calculado en 30 mil dólares.
El vestido deberá llegar el viernes desde Buenos Aires en el avión de su padre, el empresario tabacalero y propietario de medios de prensa Eduardo Nicolás Bo.
La ceremonia religiosa está prevista para el segundo sábado de noviembre en la capilla del colegio Las Vizcaínas, de México, y la pareja tiene previsto instalarse en Miami.
Cristian, de 27 años, y Gabriela, de 23, se conocieron en diciembre pasado en el balneario uruguayo Punta del Este, donde ambos pasaban sus vacaciones.
