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Murió pintor y escultor italiano Enrico Baj

Con su vena irónica y satírica, Baj dominó durante 50 años el escenario de las vanguardias europeas junto a Lucio Fontana y Piero Manzoni.

16 de Junio de 2003 | 10:00 | ANSA
ROMA.- El pintor y escultor italiano Enrico Baj murió el domingo por la noche, a los 79 años, en Vergiate (provincia de Varese), se informó hoy.

Con su vena irónica y satírica, Baj dominó durante 50 años el escenario de las vanguardias europeas junto a Lucio Fontana y Piero Manzoni.

La obra de este artista excéntrico, que abarca las artes figurativas y el ensayo, puede catalogarse en el ámbito del neodadaísmo.

Baj nació en Milán en 1924. En 1951 firmó el manifiesto del movimiento del arte nuclear, que se oponía a la abstracción geométrica y a "todo tipo de 'ismo' académico" en nombre de la "investigación de las nuevas formas del hombre: las del universo atómico".

Desde entonces el artista milanés adoptó en pintura la que luego se transformó en su forma expresiva preferida: el collage, la descomposición de las formas para expresar la explosión de la materia y de la imagen.

Los collages policromáticos, atravesados por una vena jocosa e irónica, se transformaron en la expresión visual de la vena satírica de Baj. Son inolvidables sus grotescos Generales, como el teniente John Talbot, realizados con trozos de género, pasamanerías, medallas, espejos rotos, fragmentos metálicos y conchillas.

De las obras nucleares de 1951, en las cuales el gesto, el goteo y las manchas de color desarrollan el tema de un bing bang atómico, creativo y destructivo al mismo tiempo, pasando a través de Damas, Generales, muebles de estilo, espejos, esculturas de Ubu, retratos de los proustianos Guermantes, máscaras tribales, Baj reabre su ciclo apocalíptico enriqueciéndolo últimamente con algunas telas dedicadas a la obra de Gilgamesh.

Los hilos conductores de su amplia producción son dos: la denuncia, desde la amenaza atómica a la violencia y agresividad humana, y el humor, que va del grotesco al humor negro.

André Breton, en un ensayo, reconoció inmediatamente que "el aspecto lúdico e irónico de Baj esconde un constante y coherente compromiso contra toda forma de destructividad y de opresión del hombre sobre el hombre".

Dino Buzzati escribió sobre él: "Antibeligerante por naturaleza, no le disgustaría desencadenar una pequeña guerra personal contra los imbéciles, aun sabiendo que sería una causa perdida frente a un adversario tan inmenso en número y potencia".

Pero su espíritu polémico emergió también en la pintura, que vuelve al sujeto, basta para ello recordar uno de los cuadros más controvertidos y discutidos, como "Los funerales del anárquico Pinelli".

Pero Baj no fue sólo pintor y escultor. Además de las artes figurativas (pintura, grabado, escultura, cerámica), escribió unos quince ensayos y colaboró con revistas en una continua asociación con poetas y escritores.

Las muestras del artista se cuentan por decenas. Es muy reconocido en el exterior, sobre todo en Estados Unidos.

La última y quizás la más vasta muestra antológica del artista fue exhibida en octubre del 2001 en el Palacio de las Exposiciones de Roma, donde se presentaron obras que van desde 1951 hasta 2001, y más de 300 cuadros.
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