LOS ANGELES.- Hollywood despidió este lunes a Katharine Hepburn, quien falleció la víspera a los 96 años en su casa en Connecticut (noreste), lejos de esta ciudad de la costa oeste que la legendaria actriz siempre desairó.
"Desde el momento en que llegó a Hollywood, Hepburn proyectaba una imagen bastante diferente a la de la típica estrella de Hollywood", escribió Ephraim Katz, en "The Film Encyclopedia".
"Se paseaba por la ciudad en pantaletas, rechazaba dar entrevistas, no daba autográfos, y mantenía su vida privada en absoluto secreto. No se mezclaba con el mundillo de Hollywood, prefiriendo siempre la compañía de un selecto grupo de intelectuales", añadió.
Aún así, una muchedumbre de admiradores se congregó este lunes frente a la estrella de la diva que ganó cuatro veces un Oscar en el paseo de la fama en pleno centro de Hollywood.
"Era un ejemplo para las mujeres", dijo una admiradora mientras depositaba su ramo de flores sobre la estrella de bronce de la actriz, rodeada desde la víspera de candelabros, flores blancas y viletas y mensajes de cariño.
La actriz Jane Fonda, que trabajó junto a Hepburn en 1981 en "La Laguna Dorada" dijo estar muy triste por este deceso.
"Kate era un fuente poderosa de la naturaleza", dijo Fonda.
"Siempre fue una dama, nunca buscó la publicidad, era tan sólo una persona", dijo una joven mujer de la actriz que recientemente fuera nombrada como la mejor actriz de todos los tiempos por el Instituto Estadounidense de Cinematografía.
"Hay una rica ironía en el hecho de que Hollywood le rinde tanto tributo en su muerte como en su vida, cuando ella siempre rechazó los focos y la adulación que su fama acarreó", dijo a la AFP el historiador de Hollywood, Tom O’Neil.
"Nunca le importó ser una estrella ni ninguno de sus premios; ganó cuatro Oscar pero nunca se inmutó en ir a recogerlos en persona", añadió.
Anthony Harvey, el director de "El león en Invierno", dijo una vez que se topó con la estatuilla de bronce que la actriz ganó por su actuación en esa película recluído detrás de un polvoriento estante.
El premio más deseado por las estrellas estaba aún envuelto tal cual la Academia se lo había enviado.
"Actuar es el menor de los talentos. Después de todo, Shirley Temple lo hizo cuando sólo tenía cuatro años", dijo alguna vez Hepburn.
Para la actriz la vida en sí misma era mucho más importante.
Lo que realmente importa "es la vida. Caminar, las casas, la familia. Nacimiento y dolor y alegría, y luego la muerte. Actuar es sólo esperar por el flan de la torta. Eso es todo", afirmaba siendo conocida por decir siempre lo que pensaba y según ella siempre dijo "la verdad", algo que había aprendido de sus padres.
Hepburn fue conocida por ser implacable con los periodistas, directores y colegas lo que le dio una reputación de actriz "difícil" pero muy profesional.
Luego del estreno de "A Bill of divorcement", película que lanzó a la actriz al estrellato, todos los periodistas querían entrevistar a esta joven actriz, sobre la que el Hollywood Reporter escribió "después de anoche (del estreno) nació una nueva estrella, su nombre es Katherine Hepburn".
Pero el comportamiento rebelde de Hepburn hacía dudar a los productores de la película de que alguna vez se convirtiera en estrella.
Hasta que una vez le escondieron sus zapatillas y sus pantalones. La actriz, ante la mirada atónita de los reporteros y ejecutivos del estudio se apareció en el estudio nada más vistiendo su ropa interior.
"Su legado es mucho mayor que su desempeño cinematográfico, ella es es una referencia en el ideal femenino estadounidense en todo sentido", señaló O’Neil.
Hepburn fue de las primeras mujeres en Hollywood en manejar su carrera cinematográfica cuando compró los derechos de "The Philadelphia Story" que la transformó a la mujer alguna vez llamada "el veneno de la taquilla" en una leyenda del cine.
