Rettig vuelve a dirigir la Sinfónica después de trece años.
SANTIAGO.- El director de orquesta chileno Francisco Rettig tendrá a su cargo la dirección de los dos próximos conciertos de la Temporada Internacional 2003 de la Orquesta Sinfónica de Chile. Este viernes 25 y sábado 26, a las 19.30 horas, en el Teatro Universidad de Chile; regresará después de trece años para encabezar el cuarto programa del ciclo. Éste contempla el Concierto en Re mayor para violín y orquesta, Op. 61 de Ludwig van Beethoven con la participación de la solista Frida Ansaldi y la Sinfonía N° 4 en Mi bemol mayor, “Romántica”, de Anton Bruckner.
Francisco Rettig ha desarrollado una destacada labor musical en el extranjero, tanto como Director Titular de la Orquesta Filarmónica de Bogotá desde 1991, como frente a orquestas del sur, centro y norte de América, además de Europa, Australia y Cercano Oriente; donde se ha presentado regularmente.
En abril del presente año dirigió con gran éxito en el Teatro Colón a la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires en el segundo concierto de su Temporada de Abonos. El 20 de Junio de 2003 recibió la Orden Civil al Mérito en el Grado de Comendador como reconocimiento a su labor profesional y humana en la Orquesta Filarmónica de Bogotá por parte de la Alcaldía Mayor de esa ciudad.
Asimismo, el día 8 de agosto de 2003, el Concejo de Bogotá, le impondrá la condecoración Orden al Mérito José Acevedo y Gómez en el grado de Gran Cruz de Oro para enaltecer su excelente labor como Director de la Orquesta Filarmónica de Bogotá. La crítica de Argentina lo distinguió, en 1998, con el Premio al Mejor Estreno de la Temporada, al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional, por la sinfonía Turangalîla de Messiaen, en el Teatro Colón de Buenos Aires.
En 2000 los diarios mexicanos titularon “Majestuoso Mahler” cuando dirigió la Séptima Sinfonía de Gustav Mahler con Orquesta Sinfónica del Estado de México en el Palacio de Bellas Artes de la capital mexicana. Su destacada carrera internacional continuará, después de su participación en esta Temporada de la Sinfónica de Chile, con compromisos con la Orquesta de la Radio de Sofía, Bulgaria; Sinfónica Nacional de México, Lancaster Symphony Orchesta; Filarmónica de Buenos Aires; Boulder Symphony Orchestra; Sinfónica Municipal de Caracas, Venezuela; Filarmónica de Hamburgo, Alemania; Sinfónica de Belgrado y Orquesta Sinfónica de Beijin, China.
Concierto favorito del público
Beethoven terminó su único concierto para violín -en Re Mayor, Op. 61- en 1806, época también de creación del Cuarto Concierto para Piano; la ópera “Fidelio” y la Cuarta Sinfonía. Este concierto, que posee todo el lirismo y expresión romántica que su autor le impregnó, fue estrenado en 1806 por Franz Clement, un popular virtuoso que con su exhibicionismo dejó en segundo plano la obra de Beethoven.
No obstante, después de 38 años, el concierto para violín fue rescatado del olvido y reestrenado con gran éxito en Londres en 1844 por un niño prodigio, Joseph Joachim, entonces de 14 años, bajo la dirección orquestal de Félix Mendelssohn. Aunque la utilización del violín solista en registro altísimo causa aún reparos, la obra de Beethoven hoy es celebrada por todos los grandes violinistas del mundo. En esta ocasión, le corresponderá a la violinista chilena Frida Ansaldi asumir este desafío.
Actualmente radicada en Alemania, Frida Ansaldi desarrolla una exitosa labor como docente y solista. Inició sus estudios de violín a los 5 años con su padre, el profesor Fernando Ansaldi en la Universidad Católica de Chile, donde obtuvo su título de Intérprete Musical. Perfeccionó sus estudios en la Universidad de Indiana, Estados Unidos; en la Academia Chigiana de Siena, Italia, donde recibió lecciones de Leonid Kogan y en la Escuela Superior de Música de Hannover, Alemania. En 1985 ingresó, gracias a una beca, a la Academia “Von Karajan” de la Orquesta Filarmónica de Berlín, participando como integrante de esta afamada orquesta.
“Bruckner Spezialist”
Después del concierto que dirigió con la Philarmonia de Polonia en octubre de 2002, el maestro Francisco Rettig fue calificado por la crítica como un verdadero “Bruckner Spezialist”. Con este gran reconocimiento, se hará cargo en esta oportunidad de la Sinfonía N° 4 en Mi bemol mayor, “Romántica”, considerada la más popular de las sinfonías de Anton Bruckner, uno de los compositores favoritos del director orquestal junto con Gustav Mahler y Richard Strauss.
Producto de la gran admiración que Bruckner sentía por Richard Wagner, en su obra está marcada la impronta wagneriana. Al igual que Wagner, Bruckner tenía debilidad por las obras inmensas y sus sinfonías están diseñadas en forma épica, amplia, monumental. Como Wagner, quería expresar sentimientos sensuales y apasionados, dar saltos hacia lo grandioso y lo sublime.
Rasgos de estilo en armonía y orquestación de origen wagneriano, aparecen una y otra vez en él. Sus sinfonías contienen ecos y reminiscencias del material temático empleado en los dramas musicales de Wagner. Sin embargo, hay una extraña fuerza en la música del compositor austríaco. Como expresara Lawrence Gilman: “Existe en su música una curiosa intimación de mortalidad... sus páginas están llenas de una ternura divertida, consoladora, con un toque de esa grandeza de estilo que a veces hallamos en los isabelinos cuando hablan de la muerte”.
Las entradas para este concierto están a la venta desde $2.000 en boletería del Teatro Universidad de Chile, Providencia 043, metro Baquedano. Informaciones en el teléfono 6345295.
