SANTIAGO.- En el octavo concierto de la Temporada Internacional 2003 de la Orquesta Sinfónica de Chile, el destacado intérprete chileno estrenará el “Concierto Antillano” para guitarra y orquesta del compositor portorriqueño Ernesto Cordero, este viernes 22 y sábado 23 de agosto, a las 19.30 horas, en el Teatro Universidad de Chile.
La agrupación será dirigida por Francisco Rettig, en un programa que además contempla la “Fantasía Escocesa” para violín y orquesta de Max Bruch, con la actuación de Lorena González como solista, la Sinfonía N° 36 en Do Mayor K. 425 “Linz” de Wolfgang Amadeus Mozart y el poema coreográfico para orquesta “La valse” de Maurice Ravel.
El estreno del Concierto Antillano para guitarra y orquesta contará con la presencia de su autor, Ernesto Cordero, quien viaja a Chile con este motivo. Nacido en Nueva York en 1946, es en la actualidad un premiado compositor en cuya música emplea un lenguaje caribeño con pronunciado sabor afro-hispánico. Es requerido constantemente por afamados solistas deseosos de interpretar tan atractiva propuesta musical.
Carlos Pérez, quien será el solista de esta obra, ha sido definido por la crítica internacional a como “...un maestro de la guitarra” (Nueva Zelandia); “un intérprete que capta la más profunda esencia de todo lo que interpreta incorporándole a las obras una frescura juvenil que reaviva su interés” (Inglaterra) y “un magistral guitarrista con verdadera categoría de estrella” (Inglaterra).
El joven instrumentista sintió atracción por la guitarra en la infancia a través de la práctica del folclore junto a su padre y amigos cantores populares. Alumno del profesor Ernesto Quezada, se graduó con distinción máxima en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile. Ha obtenido primer premio en los Concursos Internacionales “Alirio Díaz” (Venezuela); René Bartoli (Francia); Primtemps de la Guitare” (Bélgica); “Forum Guitare” (Austria) y Fundación Guerrero (España). Ha participado como solista junto a orquestas de Inglaterra, Bélgica, Rusia, Portugal y Chile y ha ofrecido recitales en más de 20 países entre América y Europa.
Reconocido como uno de los compositores de mayor relieve del post-romanticismo alemán, Marx Bruch fue considerado también como un romántico sentimental y expresivo. Se desempeñó como director de orquesta en ciudades alemanas e inglesas y durante su período vivido en Liverpool conoció el rico folclor escocés que lo motivó a escribir una obra sobre temas populares regionales. Nació así su Fantasía sobre temas folklóricos escoceses para violín, arpa y orquesta, exigiendo para el solista principal una deslumbrante técnica.
La obra fue escrita por Bruch para el gran violinista Pablo de Sarasate. Lorena González, reconocida por su talento y fuerza interpretativa, tendrá a su cargo, en esta oportunidad, la ejecución de esta obra, donde podrá demostrar el virtuosismo que la llevó a ocupar el cargo de concertino de la Peabody Symphony Orchestra, bajo la dirección de Teri Nurai y recibir los elogios de la crítica en 1994 luego de su participación como solista en Lugano, Suiza, entre otros hechos destacados de su carrera.
La Sinfonía N° 36 en Do mayor de Mozart fue escrita durante la permanencia del genial compositor en Linz, de ahí su nombre. Como todas las obras de la última etapa en la vida de Mozart, esta Sinfonía es de una perfección absoluta en todos sus aspectos. Merece señalarse en ella una actitud espiritual casi equivalente a la adoptada por Beethoven en su Octava Sinfonía.
En el cierre de este concierto se ofrecerá “La Valse”, de Maurice Ravel, considerada una de las más brillantes páginas orquestales que deja de manifiesto la paleta sonora del compositor francés, junto al conocimiento del efecto de sus trazos, que logra una partitura que refleja una atmósfera impresionista.
Las entradas para este concierto están a la venta desde $ 2.000 en el Teatro Universidad de Chile (Providencia 043, metro Baquedano, Fono: 6345295).
