SAN SEBASTIÁN.- El Festival de Cine de San Sebastián arrancó hoy su 51 edición bien animado y no sólo por la ovación que recogió "Suite Habana", el film inaugural del cubano Fernando Pérez, sino por razones ajenas como la huelga de los trabajadores del María Cristina, el lujoso hotel de la ciudad vasca donde se hospedan las estrellas, y la controversia política que ha desencadenado un documental de Julio Medem.
No es habitual que un documental inaugure un certamen. Esta arriesgada apuesta de Pérez parece que ha salido bien a los programadores del certamen a juzgar por los aplausos que en el pase para la prensa se ha llevado la película.
El director de "Suite Habana" ha asegurado que está muy agradecido por el honor de inaugurar este certamen, pero al mismo tiempo no ha ocultado su temor ya que esta película carece del espectáculo que podría aportar otro tipo de cine a una gala festiva como la que hoy pone en marcha el festival, uno de los cuatro más importante del mundo.
Pérez ha logrado componer un retrato de La Habana con una melancólica sinfonía de personajes anónimos, ajenos a los clichés de la jinetera, el disidente, el habanero salsero o el pícaro.
En su opinión, hay muchas Habanas y él ha optado por la que menos se ve en los medios de comunicación tanto dentro como fuera del país.
Durante 24 horas acompaña a diez habitantes de la capital cubana y con su cámara digital pero sin diálogos consigue que el espectador comparta la tristeza, la ilusión, la ternura o el desencanto que sienten.
"Suite Habana", que compite por la Concha de Oro, es un film político aunque -como ha puntualizado el director- el discurso político en el film no se hace "desde la política, sino desde la realidad".
Otro documental, que todavía no se ha proyectado, ha encendido la polémica en torno al conflicto político que vive el País Vasco, trascendiendo el ámbito cinematográfico.
En "La pelota vasca, la piel sobre la piedra", Julio Medem recogió numerosos testimonios sobre la situación que viven esas tierras. Los representantes del gubernamental Partido Popular (PP), conservador, rehusaron participar en el metraje.
Algunas de las personas que expusieron su visión ante la cámara de Medem han solicitado al director que retire sus testimonios por estar disconformes con el tono de la película a la hora de abordar las causas de la violencia terrorista.
Además, la portavoz del PP en San Sebastián, María San Gil, ha pedido a la directiva del Festival que retire el documental de la programación porque "ha provocado un fuerte rechazo entre las víctimas del terrorismo de ETA".
El cineasta ha dicho que de momento no responderá a las críticas hasta que se estrene la película, el domingo 21.
Mientras luce un esplendoroso sol en San Sebastián, una imagen poco habitual se ve a la entrada del lujoso hotel María Critina: en vez de fans a la caza de un autógrafo de las estrellas se pueden ver numerosas papeletas desparramadas por el suelo con demandas laborales y a los empleados del hotel secundando la huelga indefinida.
Esto no ha afectado a las personalidades que allí se hospedan y al hotel llegaron hoy las estrellas de Hollywood como Charlize Theron y Marc Wahlberg, que acudirán a la proyección de la película "The Italian Job" en la pantalla gigante del Velódromo de Anoeta.
También en la jornada inaugural se reparten los primeros premios. La ministra española de Cultura, Pilar de Castillo, entregará el Premio Nacional de Cine al director José Luis Borau ("Río rojo").
En la gala de apertura, que copresentará la actriz María Barranco, se premiará la trayectoria del actor Alfredo Landa y se hará entrega del premio Gran Premio de la Fipresci, la crítica especializada, a la película turca "Uzak", de Nuri Bilge, así como el Gran Premio Fipresci al Nuevo Director del Año que recayó en el joven realizador danés Christoffer Boe por "Reconstruction".
Las dos películas se mostrarán en Zabaltegi, una sección que se inaugura con el último trabajo de James Ivory, "Le divorce". La sección Horizontes Latinos levanta el telón con las películas argentinas "El polaquito", de Juan Carlos Desanzo y "Los guantes mágicos", de Martín Rejtman.
