Federico Heinlein
13/11/1997
Miguel Angel Aliaga (viola da gamba, mandolina), Julio Aravena (viola da gamba bajo) Víctor Rondón (flautas dulces) y Alejandro Reyes (clavecín) forman el “Syntagma Musicum” de la Usach, reputado conjunto que ofreció un programa interesante en el Centro Cultural de España. La primera parte del concierto estuvo dedicada a música virreinal latinoamericana en adaptaciones generalmente inspiradas por la iconografía de la segunda mitad del siglo XVIII. Muestran la transición del Barroco al Clasicismo.
Escuchamos la amable “Sonata de Palomar” en una versión placentera para mandolina, con el bajo continuo de clave y viola da gamba. Resultaron ser una pequeña suite de variaciones para clavecín los “Juegos de versos sueltos y largos”, igualmente anónimos, cuyo contemplativo comienzo desemboca en el más alegre modo mayor.
Dos sonatas piezas bipartitas, en un sólo movimiento del mexicano Vargas y Guzmán, los oímos como dúos para flauta y teclado, con la ornamentación según la usanza de la época. Un Divertimento, de Capistrano Coley, en dos partes (Andante-Allegro), mostró la cabal complementación de flauta dulce y mandolina.
Después de cierto primitivismo de estas obras coloniales no dejó de impactarnos la enjundia de las creaciones barrocas francesas y germanas de comienzos de la misma centuria. Una notable suite para viola da gamba y continuo (clavecín y otra gamba), de Marin Marais, pinta drásticamente después de los cuatro movimientos de rigor una operación quirúrgica y la feliz convalecencia. Los mismos instrumentos brillaron en una suite de otro célebre gambista francés, Louis de Caix d''''Hervelois.
Acertado nos pareció el arreglo para flauta y clave de una obra organística de Juan Sebastián Bach: verdadero tour de force de Rondón, circunspectamente secundado por Reyes. Cerró el programa una valiosa composición de Telemann, Trío-Sonata (Si menor), con un muy hermoso tercer movimiento en Re Mayor.
Cada entrega de los cuatro excelentes ejecutantes fue cálidamente recibida por el público que colmaba el recinto.