Daniel Quiroga
22/7/2003
Quién otro habría logrado disciplinar al público de un teatro repleto. Sólo Juan Sebastián Bach pudo lograrlo, una vez más. La Pasión según San Mateo, que comenzó a las 19:30 horas, finalizó a las 22:30 con un auditorio emocionado. El esfuerzo compartido en el escenario por la Orquesta Sinfónica, el Coro mixto de la Universidad de Chile, dirigido por Hugo Villaroel, y el Coro de Niñas del Liceo Nº 7, de Providencia, dirigido por Paola Zamora, dieron la base del drama sacro. Los personajes fueron Maureen Marambio (soprano), Pilar Díaz (contralto), Rodrigo del Pozo (tenor), Patricio Sabaté (barítono) y Sergio Gómez (bajo). Este grupo de voces e instrumentos dio vida a un espectáculo cuyo poder emocional recibió una de las ovaciones más sinceras de parte del auditorio. Con sólo una breve detención a mediados del desarrollo, la Pasión según San Mateo no interrumpió la dirección del maestro David del Pino, quien coordinó el amplio grupo vocal e instrumental, en un trabajo artístico logrado en plenitud. Base del desenvolvimiento de este dramático suceso, llevado a la música escénica por numerosos otros compositores de todas las épocas, fue el relato bíblico en que el tenor mostró sus progresos y seguridad del rol, por demás exigente, en recitados y pasajes melódicos. Otro tanto cumplieron la soprano Maureen Marambio y la contralto Pilar Díaz, ya reconocidas como valores vocales en el género de Oratorio. Patricio Sabaté, Rodrigo del Pozo y Sergio Gómez (Jesús) completaron los personajes mencionados en el Evangelio con seguridad y expresión. Ciertamente que el manejo de la expresividad de los papeles relatores y personajes bíblicos tuvo también el apoyo instrumental de las dos orquestas y el bajo continuo con órgano y cémbalo. La complejidad del montaje, su relación con el transcurso musical fue observada con respetuosa calidad sonora, que hizo llegar al público la dramática situación ahí tratada. Semejante lucido esfuerzo de la compleja marcha de voces e intrumentos destaca al maestro Del Pino en un paso singularmente valioso de su trabajo en Chile.
Por otra parte, podría estudiarse la manera de llevar fuera de Santiago el buen resultado de un notable trabajo musical.