BUENOS AIRES.- Un ejemplar de Fervor de Buenos Aires del argentino Jorge Luis Borges será rematado en Londres sin haberse comprobado aún si se trata del libro robado de la Biblioteca Nacional en Buenos Aires, dijeron fuentes judiciales.
Peritos de la Corte Suprema de Justicia están realizando pericias caligráficas para determinar si una dedicatoria manuscrita del libro fue borrada para ocultar que se trata de la obra robada de la Sala del Tesoro de la Biblioteca, hace cinco años.
A pesar de las dudas y la demora en la investigación judicial, la casa de subastas Bloomsbury Bons confirmó que estará.
Según confirmó el embajador en Londres, Federico Mirré, Argentina venía intentando recuperar un conjunto de manuscritos y ejemplares de primeras ediciones de Borges que serán subastados en Gran Bretaña.
La vasta y completa colección incluye 239 artículos vinculados con el autor, primeras ediciones, manuscritos, artículos y libros, entre ellos Fervor..., además de objetos de Borges, con una tasación global estimada en cuatro millones de dólares.
Fuentes vinculadas a María Kodama, esposa de Borges en la última etapa de su vida, dijeron que la justicia la admitió como demandante en la causa.
Los abogados de Kodama sostienen que para comprobar si la dedicatoria de la obra fue borrada, el volumen debe ser analizado mediante un proceso químico, además de complejas técnicas que llevan su tiempo para ser completadas.
Otros manuscritos que saldrán a subasta son los textos originales de Joyce y los neologismos, publicado por primera vez en 1939 por la emblemática revista literaria Sur, cuyo precio base será de 84.500 dólares.
También se pondrán a la venta Del infierno y del cielo (1943, a US$ 33.800), El último viaje de Ulises y El verdugo piadoso (ambos de 1948, a US$ 42.250 cada uno).
En 1923, Borges publicó 300 ejemplares de Fervor... y cada uno de ellos había sido dedicado y corregido por el literato.
La dedicatoria de puño y letra de Borges es una de las marcas que permitirá determinar a los peritos de la Corte a quién pertenecía la obra.
Un coleccionista y biógrafo de Borges, Alejandro Vaccaro, había declarado que el ejemplar autografiado por el autor había sido vendido hace cinco años a la Biblioteca por el coleccionista Juan Manuel Peña, pero su desaparición se denunció en febrero de 2000.
Kodama es la heredera de los derechos de autor y la presidenta de la Fundación Internacional que lleva el nombre del escritor.