Fotorama Miss Universo 2004QUITO.- Las esculturales y rubias candidatas de Venezuela y Estados Unidos encabezan la lista de las favoritas para convertirse el martes en Miss Universo frente a otras 78 postulantes, aunque todas han sido víctimas del clima adverso de Quito y algunas fueron criticadas por sus expresiones y vestidos.
La lista oficial de las 15 semifinalistas será anunciada en el Centro de Exposiciones Cemexpo de la capital de Ecuador, ubicado a escasos kilómetros de la denominada "Mitad del Mundo", un monumento que marca el cruce por el país andino del paralelo cero que divide transversalmente al mundo.
El certamen ha desatado una guerra de opiniones en sitios de Internet y en las conmocionadas calles de Quito, ubicada a 2.800 metros sobre el nivel del mar, lo que ha provocado ocasionales dolores de cabeza y malestares estomacales a algunas de las candidatas de Asia y Europa.
A esto se sumó un clima frío y una lluvia pertinaz, lo que obligó a postergar en varias ocasiones las ansiadas fotografías en traje de baño, en medio de la decepción general. Sin embargo, las postulantes han hecho gala de su elegancia y se han ganado la atención de internautas y "missólogos".
Miss Venezuela, Ana Karina Añez, una estudiante de ingeniería de 19 años y Miss Estados Unidos, Shandi Finnessey, una artista de 25 años, lideran las apuestas y las preferencias de los expertos internacionales en belleza.
De imponerse una de las dos, sería la primera vez que una rubia -natural o artificial- gana el torneo desde 1996 y mantendría el predominio que América ha impuesto al colocar a 14 de las 24 chicas que llegaron a las instancia final de las últimas ocho ediciones.
"Además de su indiscutible belleza, Ana Karina es una joven muy segura mientras que Shandi es una rubia despampanante", dijo Julio Rodríguez, del sitio www.bellezavenelozana.net.
Otras han capturado la atención por sus expresiones más que por su belleza. Miss Bolivia, Gabriela Oviedo, desató una tormenta al emitir unas declaraciones calificadas de "racistas" contra los indígenas de su país.
"La gente que no conoce mucho sobre Bolivia piensa que todos somos indios", dijo la semana pasada la espigada y blanca mujer boliviana en una entrevista.
"Es La Paz la que refleja esa imagen de gente pobre y de baja estatura, de gente india", dijo sobre la principal ciudad y sede gubernamental de Bolivia.
La postura de Oviedo causó que un movimiento en su país le pidiera abandonar el concurso, cosa que ella no hizo.
Las críticas también han llovido por los extravagantes vestidos que han lucido las candidatas, por el lujo presente en los eventos y las extremas medidas de seguridad que han rodeado al evento.
A la lista de favoritas se suma Miss Ecuador, María Rivadeneira, una pintora de 24 años, considerada la mejor candidata presentada por el país en muchos años, y Miss Ucrania, Oleksandra Nikolayenko, una estudiante de 22 años, quien pasó de rubia a castaña oscura para el concurso.
Los organizadores, las candidatas y los expertos insisten en que más allá de las curvas se evaluará la capacidad intelectual de las postulantes, que buscan la corona de Miss Universo, valuada en 200.000 dólares y que ahora está en manos de la dominicana Amelia Vega.
"Solamente una mujer preparada puede tener ese éxito y la mayoría no está preparada", dijo Jimmy Steele, asesor de ex finalistas del torneo, propiedad del magnate estadounidense Donald Trump.