Con su concierto del domingo en el velódromo del Estadio Nacional, Oasis confirmó lo que ya evidencian sus recientes discos: hay vida después de ser llamados "la mejor banda del mundo", e incluso es posible seguir creciendo.
David Ponce
El tiempo estuvo del lado de Oasis en el regreso del grupo rockero inglés a la capital. No sólo porque la noche del domingo pasado salieron a la hora exacta a dar su nuevo show en Santiago, sino porque la audiencia que abarrotó el velódromo del Estadio Nacional pudo ver en vivo la mejor alineación que ha tenido hasta ahora Oasis en su carrera.
Cuando debutaron en Chile hace casi exactos ocho años, en marzo de 1998, éste era el feudo de Liam Gallagher (voz) y Noel Gallagher (voz y guitarra), con otros tres músicos reducidos a comparsa. El que el domingo actuó en Santiago fue un grupo con más carácter, acrecentado por las canciones de su reciente disco
Don’t believe the truth (2005) y por el equilibrio que hay entre sus actuales integrantes.
El carisma del cantante Liam Gallagher sigue intacto. La primera frase de la primera canción de su nuevo disco fue también la primera del concierto: "Llevo conmmigo una locura donde quiera que voy", anunció en "Turn up the sun", con una chaqueta blanca que lo hacía brillar sobre el escenario, para encarar de entrada a la audiencia y desatar la fiebre. La actitud arrogante sigue en pie y, aparte, está cantando con más rudeza que antes.
Canciones que abren nuevos horizontes melódicos como "The importance of being idle" y "Guess God thinks I’m Abel" son los mejores argumentos del actual disco. Y es otra cosa ver a Oasis con el sólido bajista Andy Bell, alguna vez guitarrista de los recordados Ride, con el competente baterista Zak Starkey, hijo del mismísimo Ringo Starr, y con un tecladista que, además de conjugar en exactas porciones el
look de Harrison y el de Lennon en los Beatles ’69, complementó de maravillas las guitarras de Oasis con sonidos de cuerdas, flautas y pianos.
La eminencia gris sigue siendo el guitarrista Noel Gallagher, quien a veces queda a cargo del grupo para cantar "The masterplan" (1998) y canciones recientes como "Mucky fingers" y "The importance of being idle", en la que el falsete parece mimetizarlo con Chris Martin, de Coldplay. Y algunos de los mejores momentos son aquellos en los que comparte voces con su hermano, como en "Aquiesce" (1998), donde Liam corre con el desparpajo de las estrofas y Noel con la melodía en los estribillos.
"Liam" y "Noel" fueron, de hecho, gritos con que la audiencia homenajeó por turnos a la familia, complacida por la ferviente recepción. Con "Wonderwall" (1995), ya avanzada la noche, quedó pavimentada la ruta final de éxitos que Oasis administró bien con "Champagne supernova" (1995), "Rock ’n’ roll star" (1994) y "Don’t look back in anger" (1995). Aún así faltaron al menos cuatro hits, entre ellos "Supersonic" y "Roll with it" (de 1994), "Don’t go away" (1997) y "Little by little" (2002), pero luego de una hora y media de Oasis en vivo el público no estaba para cálculos. El grupo dejó satisfechos tanto a quienes pudieron notar la balanza a favor de esta actuación al lado de la de 1998, como a los que parecieron ver al grupo en vivo por primera vez, gracias a quienes Oasis se ganó en definitiva una nueva audiencia fiel en Chile.
Las elegidas
De las dieciocho canciones del show, Oasis tocó siete de su nuevo disco
Don’t believe the truth (2005) y repartió el resto en su catálogo: cuatro de
Definitely maybe (1994), cuatro de
(Whats’s the story) Morning glory? (1995), dos de
The masterplan (1998) y una de
Heathen chemistry (2002). Ni se detuvieron en sus discos
Be here now (1997) y
Standing in the shoulders of giants (2000). Éstas fueron las canciones del velódromo.
1. "Turn up the sun" (2005).
2. "Layla" (2005).
3. "Bring it on down" (1994).
4. "Morning glory" (1995).
5. "Cigarettes and alcohol" (1994).
6. "The importance of being idle" (2005).
7. "The masterplan" (1998).
8. "Songbird" (2002).
9. "A bell will ring" (2005).
10. "Acquiesce" (1998).
11. "Live forever" (1994).
12. "Mucky fingers" (2005).
13. "Wonderwall" (1995).
14. "Champagne supernova" (1995).
15. "Rock ’n’ roll star" (1994).
16. "Guess God thinks I’m Abel" (2005).
17. "The meaning of soul" (2005).
18. "Don’t look back in anger" (1995).
19. "My generation" (1965, original de The Who).