|
Datos técnicos de la encuesta: |
El estudio fue realizado en los principales centros urbanos del país: Santiago, Antofagasta, Coquimbo/La Serena, Valparaíso/Viña del Mar, Concepción/Talcahuano y Temuco.
Loa entrevistados fueron 2770: hombres y mujeres de entre 16 y 80 años, de todos los niveles socioeconómicos (ABC1, C2, C3, D y E). Incluye también a la extrema pobreza.
Esta es la primera vez que se incluye al segmento de los adultos mayores dentro del grupo objetivo de la encuesta.
|
SANTIAGO.- Los adultos mayores de 65 a 80 años de edad manifestaron su preocupación por la formación que está entregando la televisión a niños y jóvenes que para ellos es carente de contenidos valóricos y con influencias hacia conductas inadecuadas. Así lo señala el informe "Televisión y Adultos Mayores" realizado por el Consejo Nacional de Televisión y basado en los datos de la Quinta Encuesta Nacional de Televisión 2005.
Lo que más critican los televidentes de mayor edad, al igual que el total de la población,
es la presencia de vocabulario grosero en un 79% de los casos y de escenas de sexo y desnudos en un 55% de los casos. El rechazo a estos contenidos va aumentando con la edad.
En relación al trato discriminatorio, los adultos mayores hacen menor hincapié en esta variable a diferencia de los jóvenes quienes son más sensibles a los nuevos temas en materia de imagen y diversidad social en la televisión.
Un 96% de los adultos mayores dijo que debe existir algún tipo de regulación en televisión abierta y a la vez se inclinan por una regulación estricta tanto en horarios como en contenidos, a diferencia de los televidentes más jóvenes, que prefieren principalmente una regulación horaria.
Mientras los televidentes mayores son más favorables a una regulación más estricta, el segmento de 16 a 25 años es el más proclive a una regulación moderada, escasa e incluso inexistente.
Consumo de medios
En relación al consumo diario de medios, los adultos mayores privilegian la televisión en un 80% de los casos.
Es el segmento que ve más tiempo TV abierta – 2 horas y media- superando incluso al segmento de 16 a 25 años. En una segunda instancia le sigue la radio con un 57%, el consumo de diarios con un 25%, la Televisión de pago con un 23% y en última instancia Internet con tan sólo un 4% de los casos. En comparación con las mujeres, son los hombres los que consumen más televisión siendo los noticiarios su primera preferencia y el que presenta el mayor nivel de consumo diario, en comparación con el resto de la población.
Los adultos mayores, a la vez, son el segmento más fiel a la programación -58% dijo ver concentrado un programa- y el que menos realiza “zapping”; sólo un 25% dijo cambiar de programa durante la publicidad a diferencia de los jóvenes que lo hacen en un 43% de los casos. Es decir, a medida que se avanza en edad, el consumo de televisión se hace más concentrado y menos “volátil”.
Este segmento, entre 66 a 80 años de edad, y al igual que los chilenos en general, prefieren los programas nacionales mucho más que las realizaciones extranjeras.
Satisfacción con la TV
Los adultos mayores y al igual que los jóvenes son quienes están más satisfechos con la oferta de la televisión abierta. Sin embargo, a la hora de ver los aportes de la pantalla a la formación valórica o a la influencia de conductas presentan sus principales críticas.
El 86% de los adultos mayores encuestados dijo que la televisión estimula el consumismo de los niños, el 72% que estimula la violencia en las personas, el 67% que provoca temor a ser víctima de robos o asaltos, el 63% que hace que le vaya mal a los niños en el colegio y el 62% que permite que los jóvenes tengan conductas sexuales inapropiadas. A diferencia de los juicios de este grupo etáreo, los más jóvenes son los que menos comparten sus apreciaciones frente a la pantalla siendo a la vez los menos críticos de los efectos televisivos.
Sobre los noticiarios, consideran que dan buena información sobre las cosas que afectan la vida cotidiana de las personas pero a la vez critican la sobreoferta sobre hechos delictuales. En relación a las teleseries, un 90% las considera entretenidas, de buena producción y que ayudan a compartir en familia, sin embargo, los adultos mayores de 65 años son más críticos que el resto de la audiencia. En primer lugar, no están muy de acuerdo en que éstas sean aptas para niños menores de 10 años o para pre-adolescentes entre 10 y 14 años.