JERUSALÉN.- Roger Waters, el legendario ex bajista del grupo de rock Pink Floyd, decidió trasladar a un pueblo judeo-árabe, símbolo de coexistencia, el concierto que debía ofrecer en junio en Tel Aviv, anunciaron los organizadores.
Decenas de artistas palestinos le habían pedido en una carta abierta que renunciase a tocar en un país "que pisotea los derechos de los palestinos y practica una política de limpieza étnica" contra ellos.
Como respuesta, el concierto se celebrará en la aldea de Neve Chalom, a unos 30 km al oeste de Jerusalén.
La canción de Pink Floyd "Another Brick in the Wall" (Otro ladrillo en el muro) se ha convertido en un emblema de los opositores al "muro" de separación que Israel construye en Cisjordania.