Marcelo Contreras
Tras la fractura, era el momento de constatar cómo sanó una de las partes. Viernes 19 por la noche, teatro Caupolicán con 2.500 asistentes. El Inti-Illimani de la facción que lideran los hermanos Coulon estrenando
Pequeño mundo, su primer álbum después del quiebre que separó a esta banda de la facción que lidera Horacio Salinas, el histórico motor musical del grupo chileno.
Se sintieron los nervios, las palabras de más y el volumen algo menor. Pero también hubo emoción. Desde el aplauso cerrado y de pie que se llevó este Inti nuevo, una agrupación preocupada de proyectar el nombre de la banda en un telón y dos pantallas desde antes del primer acorde, hasta la genuina impresión en algunos pasajes musicales que pertenecen a esta etapa que comienza.
"Tu pequeño mundo", que en el disco es apenas un pasaje simpático, en vivo se convirtió en una pequeña, lúdica y bella sinfonía, que convocó a un quinteto de cuerdas más un tecladista.
Junto a los ocho miembros de este Inti-Illimani ensamblaron una pequeña orquesta, e irradiaron un mensaje con la energía de su interpretación, y con la confianza que progresivamente ganaron en el escenario: que aún hay vida creativa después de una rasgadura como la que ellos han vivido.