LOS ANGELES.- Antonio Banderas tuvo hoy Hollywood a sus pies durante la entrega del premio Gabi, el máximo galardón del Festival Internacional del Cine Latino de Los Angeles, que este año estuvo dedicado a la carrera del actor malagueño.
"Estoy teniendo mucha suerte y me está mosqueando que a lo mejor tengo una enfermedad que no sé", declaró a Efe con su habitual dosis de humor y humildad a su llegada al Festival.
Para entonces el teatro Egipcio donde hoy concluye la décima edición del festival era la fiesta del cine hispano.
La presencia de Banderas, acompañado de una resplandeciente Melanie Griffith, causó el caos circulatorio en el Bulevar Hollywood, más conocido como el Bulevar de las estrellas.
Y en el otro extremo de la alfombra roja, ya a las puertas del teatro, la Andalucía que tanto ama Banderas mostraba algunos de sus mejores paisajes, parte de la presentación del libro "Cine y Turismo" con el patrocinio de la Junta de Andalucía.
Pero toda la atención estuvo en el actor que paciente, aunque algo cansado tras llegar pocas horas antes de su nuevo rodaje en Luisiana, saludó a sus seguidores, posó para todas las fotos y hasta sonrío a los que le llamaban "macizo" mientras le pedían un autógrafo.
"Aún me considero joven, pero he llegado a un momento de mi vida en el que es interesante mirar a atrás y ver muchas películas, gente, caras y mucha ayuda", afirmó el intérprete que a sus 47 años es el más joven galardonado con este honor bautizado con el nombre del director de fotografía Gabriel Figueroa.
"Es joven pero debe entender lo que significa para nosotros, para la comunidad", explicó el actor y cofundador del festival, Edward James Olmos, seguro de que el premio le animará a ser "aún mejor".
Olmos admiró la "pasión y la dedicación" de Banderas, las mismas palabras de Andy García en una nota de cariño enviada al festival.
En persona, la veterana Lupe Ontiveros llenaba al malagueño de abrazos y besos a la vez que le llamaba "chiquillo" y "gachupín".
A su lado, Griffith no dijo nada, con el orgullo del momento en la mirada y el nombre de su marido bien claro grabado en su hombro.
Por carta, Sylvester Stallone le dijo que le odiaba "por tenerlo todo" y hasta el consejero de Turismo u Comercio de Andalucía, Paulino Plata, se apuntó al momento de gloria de Banderas seguro de que el actor representa "lo mejor de los andaluces".
Ya desde el podio, Banderas prefirió aceptar el honor, una estatuilla diseñada por Robert Graham, con el deseo de que sus 17 años de trabajo en Estados Unidos y las 75 películas de toda su filmografía puedan servir a otras generaciones.
"Porque yo amo a mi gente y me reconozco en su forma de entender el mundo que no es integrista. No queremos imponernos al mundo. Queremos compartir", resumió el actor y director de los hispanos.
Un acto emotivo que como ya ha sido norma a lo largo de esta edición del Festival no estuvo falto de tropiezos.
A Olmos se le trabaron las ideas desde el podio donde rebautizó el nuevo filme de Banderas como director, "El camino de los ingleses", como "El camino de Los Angeles".
Asimismo la organización anunció la proyección en esta gala de "Atame", de Pedro Almodóvar, como si se tratara de un filme del mexicano Alfonso Cuarón.
Y por supuesto llegado el montaje en honor a la carrera de Banderas, el sonido de sus películas, desde "Mujeres al borde de un ataque de nervios" a "Desperado" pasando por su primer filme en Estados Unidos "The Mambo Kings", brilló por su ausencia.
Nada logró deslucir un acto que el actor hizo emotivo especialmente en su dedicatoria.
Tomando una pausa, Banderas le dio un nuevo ritmo a su discurso con una larga lista de nombres, desde Rita Moreno a Michael Peña pasando por Penélope Cruz y Almodóvar a María Félix y César Romero, Javier Bardem, Paz Vega, Anthony Quinn o Guillermo del Toro, "y muchos más, la prueba de que trajimos algo a esta profesión".
Un discurso que puso de nuevo a la sala en pie y borró el recuerdo ya lejano del comentario que en su día hizo el polémico cineasta Spike Lee al señalar que no existe un "boom" del cine latino, "es tan sólo que Antonio Banderas está en todas partes".